Las salidas de aceites envasados en junio se situaron en 53,5 millones de litros (-16,2% respecto al mismo mes de un año antes), de los que 23,4 millones correspondieron a aceite de oliva y a aceite de oliva virgen; 1,3 millones a aceite de orujo de oliva; y 28,6 millones a aceites refinados de semillas oleaginosas (24,5 millones de girasol y 3,8 millones de mezcla de semillas).
En concreto, las ventas de la categoría virgen sumaron en ese mes un total de 2 millones de litros (-42,2% respecto a junio de 2016), mientras que las de virgen extra se redujeron un 2,5%, hasta 9,6 millones de litros.
Por su parte, las ventas de aceite de oliva suave e intenso se situaron en 7,8 millones de litros (-40,5%) y 3,9 millones de litros (-47,6%), respectivamente.
Volviendo a los datos de lo que va de campaña 2016/17, las ventas totales se situaron en 228,6 millones de litros, frente a los 266,2 millones que se vendieron en el mismo periodo de la temporada anterior, lo que supone un descenso del 14,09%.
En cuanto a las cifras de ventas de aceite de oliva suave se situaron en 79,5 millones de litros (-21,11%), mientras que las ventas de intenso cayeron un 16,19%, hasta 40,9 millones de litros. De aceite de orujo de oliva salieron en ese periodo un total de 14 millones de litros (+2,5%).
Finalmente, en porcentajes de ventas en enero y junio, el aceite de oliva virgen (extra y virgen) representó el 47,74% frente al 44,11% del mismo periodo de 2016. El aceite de oliva suave, por su parte, representó el 34,29% frente al 37,29% registrado un año antes; mientras que el aceite de oliva intenso pasó de un 17,97% a un 18,60% entre enero y junio de 2017.
