El presidente del Consejo Sectorial de Aceite de Oliva de Cooperativas Agro-alimentarias de Andalucía, Cristóbal Gallego, ha subrayado “la falta de homogeneidad entre unas zonas y otras”, incidiendo en que el olivar de secano y el de riego deficitario van a ser “especialmente damnificados frente a explotaciones de regadío donde mantendrán e incluso pueden superar producciones pasadas”.
En consecuencia, Gallego ha pedido a las administraciones acometer las infraestructuras necesarias con el fin de llevar el agua a zonas donde actualmente no existe acceso y ha urgido la activación del mecanismo de autorregulación de la oferta en el sector, con el objetivo de evitar que se produzcan las fluctuaciones y picos de precios, tanto en origen como en punto de venta, debido a campañas de producción tan dispares.
En cualquier caso, desde Cooperativas Agro-alimentarias de Andalucía se ha hecho un llamamiento a la tranquilidad, ya que no se trata de una campaña históricamente baja, siendo la 2017/18, y a espera de que los datos finales la confirmen, la cuarta con menor producción de la última década, por detrás de las temporadas 2011/12, 2014/15 y 2008/09.
Desde Asaja-Jaén han asegurado que la falta de precipitaciones y las altas temperaturas son las principales causas de este notable descenso; no en vano, y tras una buena floración en primavera, el comportamiento climatológico posterior ha hecho estragos en el sector. “No se produjo el cuajado adecuado debido a las escasas precipitaciones, algo que, sumado a una primavera, verano y principio de otoño extremadamente secos y calurosos han traído estas consecuencias”, ha apuntado Luis Carlos Valero, gerente y portavoz de la organización agraria, quien ha señalado que “en Jaén baje producción un 28,5% es un mazazo para una provincia que depende, en lo que agricultura se refiere, casi en exclusiva del olivar”.
Para Valero, los datos de producción españoles, andaluces y, sobre todo jienenses, contrastan con los primeros aforos realizados por diferentes organismos en los que se apunta una ligera subida de la cosecha de aceite y aceituna.
“Si en nuestra tierra, cuna del olivar, baja la producción, pero la media mundial es más alta, podría darse una situación tan poco favorable respecto a los precios que no se correspondieran con nuestro descenso”, ha indicado, al tiempo que ha añadido que, “sin embargo, consideramos que el mercado este año estará bastante equilibrado, por lo que no debería darse ningún repunte a la baja en los precios, más bien todo lo contrario”. “En esto también influirá notablemente el comportamiento de las precipitaciones este otoño, invierno y primavera”, ha precisado.
“Los datos son incluso peores de lo que esperábamos”, ha señalado Juan Luis Ávila, responsable de olivar de COAG-Andalucía y secretario general de COAG-Jaén, quien ha explicado que “el olivar de secano y el de regadío que no ha podido regarse están en situación límite. Por eso, pedimos que comiencen a articularse todas las medidas que se aplican en caso de sequía, tales como la reducción de módulos fiscales, la exención del IBI, préstamos a interés cero, etc.”.
Además, Ávila ha destacado que “nos preocupa lo que pueda pasar en los próximos días, porque no hay previsión de lluvia de aquí a dos semanas. Por eso, vamos a pedir que se amplíe la autorización para regar a aquellos productores que no han consumido totalmente su dotación de agua”.
COAG-Andalucía también ha pedido a la Consejería de Agricultura que se resuelvan cuanto antes las ayudas a los planes de mejora, antes del inicio de la campaña, y que se agilice todo lo posible el pago de las ayudas de incorporación que todavía están pendientes.
Por su parte, UPA-Jaén ha considerado que es muy destacable también la elevada variabilidad existente entre las explotaciones, tanto de secano como de regadío. En este sentido, su secretario general, Cristóbal Cano, ha afirmado que el olivar con riego ha sido el colchón que puede salvar, en parte, la cosecha y recuerda que muchos agricultores de secano han perdido el fruto y, el que queda en el árbol, está en una situación muy complicada.
Cano ha valorado el aforo estimando que las cifras están en consonancia con lo que hay en campo. "Nosotros dimos, hace justo una semana, una cifra de un 25% menos. La Junta lo sitúa un 28,5% por debajo del pasado año. Un dato que, no obstante, hay que tomar con mucha cautela porque dependerá de la evolución climatológica hasta que comience la recolección de forma generalizada. Pero el principal daño se va a producir en el empleo, especialmente en la contratación de las mujeres, porque el número de jornales previsto, 4,8 millones en la provincia, es muy inferior al contabilizado el pasado año, de 5,17 millones. Y, a partir de ahí, la consecuencia directa es una pérdida de riqueza en nuestros pueblos", ha lamentado.
Precios estables
Asimismo, el Grupo Interóleo ha resaltado que con estas cifras se confirma la “drástica” disminución de cosecha respecto al año pasado, situándola además como la cuarta peor campaña desde 2000/01.
Estas previsiones, en su opinión, reafirman su conclusión de la importancia de la concentración en estructuras fuertes y profesionales como el mejor camino para obtener unas rentas por encima de los costes de producción.
