“Vamos a exigir al Ministerio de Agricultura y a las Comunidades Autónomas que cambien el modo en que se limitan las ayudas de la Política Agraria Común (PAC) a los mayores perceptores”, han explicado desde la organización.
El objetivo de UPA es lograr fondos para destinarlos a salvar al olivar de montaña, que es el que, en su opinión, afronta mayores costes y menor productividad.
En concreto, la propuesta de la organización se centra en aplicar un recorte del 100% a partir de los 150.000 euros de pago básico, como ya se aplica en otros Estados Miembros y tal y como establece el reglamento comunitario, lo que supone, según ha explicado, aplicar un techo máximo aproximado de 250.000 euros de ayudas directas -pago básico, verde y asociadas-.
Así, UPA ha precisado que se obtendrían fondos para destinarlos allí donde más se necesitan, lo que significa "recortar las ayudas a los beneficiarios más ricos -menos de 500 perceptores, un 0,05% del total- y aumentarlas a pequeños olivareros con alto riesgo de abandono de su actividad, que es el espíritu con el que se diseñaron las ayudas asociadas".
Esta organización agraria ha recordado que el próximo 1 de julio concluye el plazo otorgado por Bruselas para revisar las ayudas asociadas. En este sentido, “el sector se juega su futuro de cara a los próximos años”, ha destacado UPA, al tiempo que ha resaltado que “los ánimos están muy calientes en las zonas olivareras”, por lo que esperan una “participación masiva” en la concentración, en la que los agricultores acudirán con ramas de olivo y repartirán aceite de oliva y aceitunas a los viandantes.
