Desde Dcoop explican que la supuesta multa en realidad es “un pago de aranceles”. “Debido a un problemas de plazos, Hacienda entiende que hay que pagarlos y nosotros no, por eso hemos recurrido”. En cualquier caso, niegan que se trate de una multa “por importar aceite de mala calidad y españolizarlo con el fin de venderlo en Estados Unidos”.
Así, Dcoop detalla que el conflicto fiscal se remonta a una operación de 2015, “cuando ni siquiera éramos socios de Pompeian, y nuestro Grupo apenas exportaba a Estados Unidos. Conseguimos que los aceites de países terceros que compraba Pompeian se refinaran en Qorteba -antes se realizaba en otro lugar- y luego se enviaban a EEUU, con lo que ese pequeño valor añadido repercutía en nuestros socios”.
“Ahora mismo -precisan desde la sociedad-, Dcoop exporta 30.000 t. de aceite a Estados Unidos y poseemos el 50% de Pompiean, que es la marca líder en el mercado norteamericano, lo cual implica que otros operadores, como Deoleo, están perdiendo cuota de mercado”. “A nuestros socios no les ha costado nada, porque el pago de esos aranceles obviamente se ha repercutido en el precio del producto”, recalcan.
En este sentido, Dcoop lanza una reflexión al mercado: “¿Es que por ser una cooperativa de agricultores no podemos trabajar como el resto de operadores del sector: envasar, importar-exportar, participar en empresas…? ¿O quieren -algo que no van a conseguir- que nos quedemos como simples olivareros?”.
Finalmente, Dcoop recuerda que España importa, al igual que los demás países de la Unión Europea, unas 130.000 toneladas de aceite de oliva al año. “Todos los grandes operadores del sector lo hacen”, asevera, al tiempo que reitera que “el planteamiento más importante ahora mismo es que se prohíban las importaciones, por lo que hacemos un llamamiento a todos los operadores del sector para que se pronuncien y se sumen a esta petición”.
