Según recoge el estudio, las evidencias apuntan a que los pacientes con fibromialgia pueden tener un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular que la población general. El aceite de oliva ha mostrado efectos cardioprotectores en la población general y en sujetos con ciertas patologías. Sin embargo, la influencia del consumo de aceite de oliva sobre factores de riesgo cardiovascular en pacientes con fibromialgia no había sido estudiado hasta ahora.
La investigación se realizó en muestras de sangre de mujeres con fibromialgia que consumieron 50 ml. de aceite de oliva orgánico diariamente durante tres semanas. Las pacientes fueron aleatorizadas en dos grupos: 15 mujeres ingirieron aceite de oliva virgen extra y 15 tomaron aceite de oliva refinado. Ambos tipos de aceite de oliva tienen la misma composición en ácidos grasos monoinsaturados (MUFA), principalmente ácido oleico, pero difieren en el contenido de componentes minoritarios como el α-tocoferol y los compuestos fenólicos, los cuales están en pequeña proporción en el aceite de oliva refinado.
Los marcadores de riesgo cardiovascular (parámetros de coagulación de la sangre, índices de plaquetas, recuento de glóbulos rojos, marcadores inflamatorios, perfil lipídico, óxido nítrico y cortisol), así como los parámetros antropométricos (peso, índice de masa corporal y perímetro abdominal) se midieron al inicio del estudio y después del consumo de aceite de oliva.
Los resultados mostraron que tanto el AOVE como el aceite de oliva refinado mejoraron los valores del marcador inflamatorio velocidad de sedimentación globular en pacientes con fibromialgia. Además, el consumo de aceite de oliva virgen extra mejoró el recuento de glóbulos rojos, mientras que la ingesta de aceite de oliva refinado mejoró el volumen plaquetario medio, el ancho de distribución plaquetaria, los niveles de fibrinógeno y el marcador inflamatorio ratio neutrófilos/linfocitos, así como el perímetro abdominal de las pacientes.
Estos datos indican que las capacidades antitrombóticas y antiinflamatorias de ambos tipos de aceites de oliva orgánicos en pacientes con fibromialgia parecen no depender solo de los componentes minoritarios del aceite de oliva, ya que el aceite de oliva refinado es pobre en dichos compuestos. Por lo tanto, las propiedades beneficiosas del aceite de oliva en mujeres con fibromialgia pueden estar relacionadas con su composición de ácidos grasos, rica en MUFA.
Los resultados de este estudio han demostrado que el consumo de aceite de oliva tiene propiedades antitrombóticas y antiinflamatorias en pacientes con FM, mejorando los valores de varios marcadores de riesgo cardiovascular. Por tanto, tanto el AOVE como el aceite de oliva refinado pueden ser útiles como adyuvantes para la prevención y/o tratamiento de los trastornos cardiovasculares en estos pacientes.
Autores: Alma Rus, María Encarnación Aguilar-Ferrándiz y Ramón Carmona, profesores de la Universidad de Granada; y Francisco Molina, María Josefa Martínez-Ramírez y María Luisa del Moral, profesores de la Universidad de Jaén.
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