Las virtudes del aceite obtenido de las aceitunas se conocen desde la antigüedad. Toma el aceite que hace bien al cuerpo, se decía con razón. Una cucharita por la mañana sirve para asegurar el correcto balance energético y a asimilar la cantidad de antioxidantes necesaria. Contra los efectos negativos de los radicales libres, existe la acción benefica del aceite de oliva virgen. <br /><br />Muchos artículos científicos publicados en los últimos años confirman los diferentes aspectos positivos del aceite de oliva sobre la salud. <br /><br />El aceite de oliva, especialmente si es virgen extra y de alta calidad, es muy beneficioso y contribuye a “curar” el cuerpo y el alma. Lo sabían muy bien en la antigüedad: la literatura sobre el tema es muy amplia y curiosa, muy abundante en anécdotas e ideas para profundizar. Hoy, el aceite de oliva virgen extra está considerado por los nutricionistas como un importante “functional food”, alimento funcional útil para nuesta salud física y mental. Y el aceite de oliva, visto en su dimensión de efectos benéficos sobre la salud, lo encontramos ahora como hilo conductor en una novela con el emblemático titulo L’olio della conversione (El Aceite de la Conversión). El libro, recién publicado por la editorial Besa y escrito por Luigi Caricato, cuenta la historia de un místico santo del siglo XVI, Giuseppe da Copertino que, cuando era niño, sufrió una terrible enfermedad que lo mantuvo en la cama durante más de cuatro años seguidos, con un atroz sufrimiento. Fue la unción con el aceite de una lámpara votiva la que lo salvó de una muerte cierta. A partir de entonces, se sucedieron progresivamente la conversión, la elección del sacerdocio y el camino hacia la santidad. <br />
