Los últimos avances en la reforma de la PAC protagonizan la asamblea general de Asaja-Andalucía

La Asociación Agraria Jóvenes Agricultores (Asaja) de Andalucía ha celebrado el pasado viernes en Antequera su asamblea general, a la que han asistido más de 1.000 agricultores de toda Andalucía con el objetivo de conocer los últimos avances en la reforma de la Política Agraria Común (PAC), cuya fase de negociación europea está previsto que concluya en las próximas semanas. El encuentro ha contado con la participación de la secretaria general de Agricultura, Isabel García Tejerina, que ha centrado su intervención en analizar la situación actual de la reforma de la PAC y las principales consecuencias que tendrá para los agricultores y ganaderos andaluces. En la asamblea, el presidente de Asaja-Andalucía, Ricardo Serra, ha recordado a García Tejerina que es importante para los agricultores andaluces que el modelo nacional de la nueva PAC contemple un pago base que combine los criterios administrativos y productivos para responder así a las necesidades de cada agricultura y de cada comarca agraria. Tal y como ha señalado Serra, esta complementación de criterios es viable técnicamente y cuenta con el visto bueno de la Comisión Europea, y además, figura en la “Propuesta de posición común para la Reforma de la PAC Horizonte 2020”, que suscribió el ministro de Agricultura, Miguel Arias Cañete, con los consejeros de Agricultura de las Comunidades Autónomas el pasado 15 de junio de 2012. Para la organización agraria, es precisamente la combinación de criterios administrativos y productivos la que, unida a los avances propuestos por el Ministerio para la convergencia interna, puede permitir que las ayudas sigan ajustándose a las realidades productivas de cada comarca. Con ello “se salvaría no solo al sector productor, sino a todo el entramado socioeconómico de dichas comarcas, de tal manera que el Ministerio de Agricultura cumpla con su compromiso con los agricultores y las Comunidades y mantenga el mapa productivo español sin grandes convulsiones", ha apuntado Asaja-Andalucía. De lo contrario, según ha resaltado, la agricultura más productiva de España, y singularmente la agricultura andaluza, entraría en “un coma profundo” con graves consecuencias para la economía y el empleo. Labor del Ministerio Por su parte, la secretaria general de Agricultura, Isabel García Tejerina, ha afirmado que “desde el Ministerio trabajamos con ahínco para restablecer el crecimiento económico y para invertir la política agrícola que llevaba este país, para lo que se ha abierto un camino de renovación y cambio en la manera de funcionar”. Para iniciar ese camino de renovación, García Tejerina ha explicado que desde el Departamento se ha establecido, por una parte, un proceso de diálogo y colaboración con las Comunidades Autónomas y los sectores implicados, “buscando acuerdos con los grupos políticos representados en el Parlamento nacional”. También, según ha señalado, se han buscado alianzas con otros Estados Miembros, “defendiendo nuestros intereses ante la Comisión Europea y en el Consejo y trabajando conjuntamente con los grupos del Parlamento Europeo”. Según García Tejerina, la labor del Ministerio “se ha orientado a tratar el fondo de los problemas, sus causas profundas, sin perjuicio de atender también a las cuestiones de carácter coyuntural”. En este sentido, ha precisado que se ha trabajado en el mantenimiento y consolidación de los actuales apoyos comunitarios en el período 2014/20 y en la mejora de la competitividad del sector, “para lo que es preciso una mejor vertebración del conjunto de la cadena agroalimentaria”. Sobre el marco financiero presupuestario, García Tejerina ha destacado que “gracias al esfuerzo realizado, los agricultores y ganaderos españoles pueden tener la tranquilidad de que España va a seguir percibiendo el mismo nivel de apoyos que tienen actualmente, lo que en una situación económica como la actual, es realmente un éxito”. Al respecto, ha precisado que España va a disponer de 35.705 millones de euros en ayudas directas y 8.291 millones de euros para desarrollo rural para todo el periodo, “lo que supone, incluso, un pequeño incremento sobre las ayudas directas pagadas en el periodo anterior (35.414 millones de euros) y en la asignación para el desarrollo rural (8.053 millones de euros)”. En cuanto a los pagos directos, ha resaltado que se ha conseguido limitar la superficie potencialmente elegible a la declarada en 2011, “evitando la dilución desproporcionada de los importes unitarios de ayuda”. También se ha referido a los logros conseguidos con la eliminación de la obligatoriedad de que en 2019 haya un mismo importe de ayudas o “tasa plana” para los agricultores, un aspecto "muy importante" para España para evitar trasvases de fondos entre regiones o sectores. Por otra parte, y dentro del Reglamento de Pago Único, ha destacado la flexibilización del componente verde. Sobre este capítulo, García Tejerina ha indicado que las condiciones para su cumplimiento no serán tan duras como propuso la Comisión y ha detallado que en el acuerdo de Ministros de Agricultura de la Unión Europea se han introducido modificaciones para considerar superficies de interés ecológico las de cultivos leñosos con menos de 250 árboles por hectárea. “Ese tipo de plantación representa el 71% en olivar y el 60% de los árboles de frutos de cáscara que hay en España”, ha subrayado. En cuanto a la diversificación de cultivos, ha asegurado que se ha logrado un importante progreso, al aplicarse a las explotaciones que tengan 10 ó más hectáreas; debiendo hacer rotación de 2 cultivos aquellas explotaciones con una superficie comprendida entre 10 y 30 hectáreas y de 3 cultivos las que cuenten con más de 30 hectáreas. Para más información, pueden suscribirse a nuestro Newsletter Semanal impreso "Mercacei" y/o al Club Mercacei en el Club Mercacei.