El símbolo de oro

Al fin ha llegado el día que promete ser el más emocionante de sus vidas, el día en que el comandante Neil Armstrong y el piloto Buzz Aldrin se convertirán en los primeros humanos que pisen la Luna. Pero su misión va mucho más allá de un simple paseo lunar, deben dejar allí arriba un mensaje de parte de los terrícolas a los próximos visitantes de ese paisaje inhóspito cuya vista describe Aldrin como “magnífica desolación”.

Tras 2 horas y 31 minutos analizando cada centímetro de aquella arenisca blanca que flota ante la ausencia de gravedad bajo sus pies, llega el momento de regresar al Eagle, el módulo lunar en el que han llegado hasta allí. Pero, justo antes, los astronautas dejan el paquete con aquellos valiosos objetos que servirán como recordatorio de su visita a la Luna. La caja en cuestión contiene un pequeño disco de silicio con mensajes de buena voluntad de jefes de estado de 73 países -no, España no es uno de ellos-. Pero lo más importante es lo que acompaña a este disco. Se trata de un broche de oro, tallado en forma de rama de olivo por el propio Aldrin, como símbolo de paz.

No es la primera vez, ni la última, en la que una rama de olivo dorado es la protagonista de un momento histórico. Sin ir más lejos, y políticos aparte, la estrella incontestable de la jornada de investidura de Joe Biden como presidente de los Estados Unidos el pasado 20 de enero fue la cantante Lady Gaga, responsable de cantar el himno nacional al comienzo del acto. Como atuendo para la ocasión, escogió un vestido rojo y azul de la firma Schiaparelli Couture cargado de mensajes. Se trató de una pieza de dos tonos: cuerpo azul marino y falda larga roja, los colores de la bandera de Estados Unidos. No obstante, el detalle del look que más llamó la atención fue el broche dorado con forma de paloma con una rama de olivo que lució a la altura de su corazón. El accesorio, que causó un gran revuelo en redes sociales, fue descrito por la propia artista en su perfil de Twitter como “una paloma que lleva una rama de olivo para que todos hagamos las paces entre nosotros”. Con este detalle, la artista se unió al llamamiento constante que están haciendo numerosos rostros conocidos de la sociedad estadounidense, entre ellos la propia vicepresidenta, Kamala Harris, para acabar con la polarización y la crispación que sufre el país, que alcanza cotas nunca vistas, tal y como quedó reflejado con el asalto al Capitolio hace unas semanas. Porque a más de uno de esos payasos vestidos de bisontes les habría venido bien tomarse, como mínimo, una infusión de hoja de olivo antes del asedio.

El símbolo de oro

Mercacei Semanal 1.218