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COAG-Jaén advierte de la situación límite del olivar jiennense

COAG-Jaén advierte de la situación límite del olivar jiennense

lunes 07 de noviembre de 2022, 12:29h

La pertinaz sequía y las inusuales y altas temperaturas están llevando a una situación límite -sólo comparable a la vivida en la cosecha de 1994/95- al olivar de Jaén, principal provincia productora de aceite de oliva del mundo, según ha advertido la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG).

La organización agraria ha explicado que los agricultores se enfrentan a muchos problemas a causa de la sequía y las altas temperaturas, aparte de los altos costes de producción, por lo que se plantean adelantar la campaña o recoger o no la poca aceituna que hay en el árbol.

A su juicio, la situación más extrema es la del olivar de secano, donde ya se da por perdida la cosecha de este año y casi la siguiente.

El objetivo ahora, según Juan Carlos Hervás, técnico de COAG-Jaén, es que el árbol se recupere, pensando en la producción de años posteriores.

En el caso de los olivos de riego, "la situación empeora por días", según la organización, que ha apuntado que la lluvia no llega a la provincia y no se ha podido regar en tres semanas o un mes, por lo que el fruto se está arrugando. Además, ha señalado que a esto se une que cada vez hay más aceituna con picaduras a causa de la mosca del olivo.

Según Hervás, la situación es "muy complicada", ya que las aceitunas están madurando antes y cada día que pasan si agua se arrugan más. “Semana a semana la situación es peor, con la aceituna más arrugada, más picada y se está cayendo, por lo que mucha gente está adelantando la cosecha”, ha añadido.

COAG-Jaén ha detallado que en los lugares donde se está recogiendo se encuentran con que el olivo, por lo seco que está y el estrés hídrico acumulado, se nutre de la aceituna y sufre mucho en el proceso de recogida, y tras quedarse sin el fruto presenta un aspecto lánguido y sin color.

Falta de agua

La organización ha asegurado que a principios del mes de septiembre se preveía que el olivar jiennense necesitaba, como mínimo, que lloviese entre 70/80 litros por metro cuadrado entre los meses de septiembre y octubre, "no para esta cosecha, cuyo fruto estaba hecho, sino para la siguiente".

Sin embargo, "apenas ha llovido, entre 5 y 60 litros por metro cuadrado, dependiendo de las zonas, y en algunas de ellas en forma de tormenta, causando aún más destrozos", ha concluido.