Según recuerda esta entidad, el AOVE es un alimento rico en vitamina E, beta-carotenos y ácidos grasos monoinsaturados que le confieren propiedades cardioprotectoras. Este alimento representa un tesoro dentro de la Dieta Mediterránea y ha perdurado a través de siglos entre las costumbres gastronómicas regionales, otorgando a los platos un sabor y aroma únicos. Y es que son muchos los beneficios de este producto y sus componentes. Así, los AOVEs reducen la presión arterial, poseen efectos antiescleróticos y antiinflamatorios, y ayudan a prevenir las enfermedades cardiovasculares. Su consumo habitual también puede reducir el riesgo de desarrollar algunos tipos de cánceres y, en el plano ambiental, ayuda a cuidar el planeta en su proceso de obtención.
En noviembre de 2010, la UNESCO aprobaba en Nairobi (Kenia) la inscripción de la Dieta Mediterránea en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.
La concreción de la idea de este proyecto surgió en España, fruto de un trabajo conjunto entre los entonces ministerios de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino (MARM) y Educación, Cultura y Deporte, y la Fundación Dieta Mediterránea, con la colaboración de las Comunidades Autónomas, impulsando los trabajos para la elaboración del documento de candidatura de carácter transnacional, en el que también participaron Grecia, Italia y Marruecos. Este documento permitió a la UNESCO valorar positivamente el significado y lo que representa la Dieta Mediterránea en estos cuatro países, desde sus diferentes aspectos culturales, sociales, históricos, gastronómicos y alimentarios, así como desde el punto de vista medioambiental, paisajístico y costumbrista.
La UNESCO considera que la Dieta Mediterránea es un patrimonio cultural inmaterial que se transmite de generación en generación, como una expresión, uso o conocimiento que se reinventa constantemente por las comunidades y los grupos, en función de su entorno, que interactúa con la naturaleza y la historia, y que infunde un sentimiento de identidad y continuidad, contribuyendo así a promover el respeto de la diversidad cultural y la creatividad humana.
La inscripción de la Dieta Mediterránea en la Lista del Patrimonio Cultural Inmaterial permite su protección, conservación y transmisión; y salvaguardar y proteger este legado histórico y cultural, además de favorecer el mantenimiento de un patrón alimentario saludable e impulsar los beneficios sociales de desarrollo rural sostenible, como el mantenimiento de la población en el territorio y la conservación de los paisajes característicos.
Asimismo, contribuye a dar valor a los productos mediterráneos, y a difundir el turismo rural, cultural y gastronómico asociado a la Dieta Mediterránea así como a enriquecer el intercambio cultural y la cooperación entre los países mediterráneos del sur para fomentar esa valorización en sus propios territorios.
Beneficios para la salud de la Dieta Mediterránea
Para celebrar esta jornada, desde Mercacei queremos destacar diez noticias publicadas este año relativas a investigaciones y estudios que constatan los beneficios saludables de la Dieta Mediterránea, que en 2025 ha vuelto a ser la dieta mejor valorada de la lista de las mejores dietas para 2025 que elabora la revista US News & World Report, que ha examinado 38 patrones alimentarios en 21 categorías.
1. La Dieta Mediterránea mejora la memoria y la cognición al modificar el equilibrio de las bacterias intestinales
Un nuevo estudio de la Universidad de Tulane (EEUU) sugiere que los beneficios de la Dieta Mediterránea para el cerebro pueden funcionar al cambiar el equilibrio de las bacterias en el intestino.
3. La Dieta Mediterránea y la actividad física mantienen la salud ósea en adultos mayores
Seguir una Dieta Mediterránea hipocalórica y practicar actividad física de forma regular mitiga el deterioro de la salud de los huesos en adultos mayores con síndrome metabólico, especialmente en mujeres. Estas son las principales conclusiones de un estudio liderado por un equipo investigador de la Universidad Rovira i Virgili (URV) que recoge la revista científica JAMA Network Open.
Un reciente estudio publicado en JAMA Network Open, la revista de la Asociación Médica Americana, ha determinado que una mayor adherencia a la Dieta Mediterránea está asociada con una reducción del 6% en el riesgo de desarrollar cánceres relacionados con la obesidad.
5. Destacan la relación entre la Dieta Mediterránea y la calidad de vida en adultos
6. La Dieta Mediterránea reduce el riesgo cardiovascular en pacientes con COVID persistente
Dos estudios realizados por la Unidad de Investigación de Atención Primaria de Salamanca (APISAL), del Instituto de Investigación Biomédica de Salamanca (IBSAL) y la Gerencia de Atención Primaria de Salamanca, publicados en la revista de alto impacto Nutrients, abren nuevas vías relacionadas con los estilos de vida para un mejor abordaje de los pacientes con COVID persistente, una enfermedad todavía muy desconocida y heterogénea que afecta a entre el 7 y el 10% de la población española, y que supone, por tanto, un importante desafío de salud pública.
Llevar una alimentación basada en la Dieta Mediterránea desde edades tempranas podría ayudar a prevenir el exceso de peso en la infancia. Así lo indica un nuevo estudio del proyecto CORALS, publicado en la revista científica Pediatric Obesity, que concluye que los niños y niñas en edad preescolar con mayor adherencia a este patrón alimentario presentan una composición corporal más saludable.
Seguir los principios de la Dieta Mediterránea y hacer ejercicio físico se vincula a una menor iniciación en el consumo de las tres principales medicaciones psiquiátricas -antidepresivos, ansiolíticos y antipsicóticos- y también a una menor iniciación en el de anticonvulsivos, vinculados a enfermedades neurológicas. Así lo demuestra un estudio encabezado por el Instituto de Investigación del Hospital del Mar y la Facultad de Ciencias de la Salud de Blanquerna-Universitat Ramón Llull.
9. La Dieta Mediterránea podría reducir el riesgo genético del Alzheimer
10. La Dieta Mediterránea podría reducir la enfermedad de las encías
Los resultados de un estudio del King's College de Londres indican que las personas que siguen una Dieta Mediterránea tienen más probabilidades de que sus encías gocen de una mejor salud, con potencialmente menores niveles de enfermedad e inflamación de las mismas.