Según los cálculo de Unió de Pagesos, Urgell, Segarra y Baix Penedès continúan con poca producción de aceituna con pérdidas en algunos casos del 70%. "Las lluvias de otoño sólo han beneficiado a los árboles con aceituna verde, pero han sido contraproducentes en árboles más estresados donde el agua y los últimos episodios de viento han derribado el fruto", ha lamentado.
También ha alertado de que en el Alt Camp las pérdidas han sido del 100%, tanto en secano como en regadío, después de una campaña anterior "muy floja". A su juicio, en el Tarragonès, la cosecha de este año ha sido correcta porque los árboles no estaban tan estresados, pero en las últimas semanas han empeorado las perspectivas con el aumento de las aceitunas picadas por la mosca del olivo que de momento ya han provocado la pérdida de un 30% del fruto.
En la Ribera d'Ebre, donde el secano es minoritario, las lluvias de finales de septiembre y principios de octubre han permitido aguantar la cosecha con una producción del 60%. Por el contrario, Unió de Pegsos los intensivos de nueva plantación presentan una notable caída; y en el Priorat la falta persistente de lluvia apunta a una producción muy escasa.
A su vez, según ha detallado, en el Baix Ebre y el Montsià ha habido un impacto desigual. En las zonas más afectadas por el granizo y la borrasca se registran pérdidas totales del 100%, mientras que en los casos más favorables no se supera el 60% de la producción. El exceso de humedad en algunas áreas está provocando que los frutos se pudran en los árboles y las fuertes lluvias de octubre han dificultado la aplicación de tratamientos para contenerla.
Finalmente, en el Baix Segrià, la granizada de Mailas, Llardecans y Seròs provocó daños de entre el 30% y el 100%. Las plantaciones de superintensivo han sido las más afectadas, por lo que desde el sindicato han reclamado a Agroseguro celeridad en las peritaciones.
Unió de Pagesos prevé que, pese a la baja producción de esta campaña, "los precios puedan mantenerse estables, pese a la creciente presión sobre el sector".
Foto de archivo: Olivos del Pla de Santa Maria en el Alt Camp. Sergi Martín.