En concreto, Manzaneda hizo hincapié en la problemática del suelo, manifestando que, tal y como se ha indicado en un artículo publicado en Nature Sustainability este mes de septiembre, “los suelos del olivar Mediterráneo están en unos límites insostenibles de degradación”.
“Es necesario tomar medidas de protección del suelo para asegurar este recurso que es el que nos proporciona que haya realmente cosecha año tras año”, resaltó, añadiendo que hay medios para revertir la situación, “ya que hay programas de restauración de cubiertas que están funcionando, es el caso de la utilización de las siembras dirigidas, por ejemplo”. Sobre estas cubiertas vegetales y la reticencia de algunos agricultores indicó que “ellos mismos se dan cuenta de que tratándolas, las van manejando mejor, tienen más agua, más recursos, más insectos que controlan tus plagas y en definitiva, hacen el cultivo más sostenible”.
De la misma manera se pusieron de manifiesto otras ideas como la importancia de la diversidad genética del olivo, “un elemento crucial para garantizar la resiliencia del cultivo al cambio climático”. En este sentido, la profesora de la Universidad de Córdoba Concepción Muñoz informó sobre el trabajo del proyecto “Gen4Olive”, que ha creado la base de datos más completa hasta la fecha sobre la diversidad del olivo.
En el marco del encuentro, Rafael Pérez de Toro, director global de Calidad, Seguridad, Salud y Medio Ambiente en Deoleo, resaltó el papel transformador del Protocolo de Sostenibilidad de la compañía. “En Deoleo hemos impulsado un modelo pionero que hoy inspira proyectos internacionales como Soil O-Live, demostrando que la sostenibilidad y la cercanía son una palanca real de cambio en el olivar”. Por su parte, Niklas Sannebro, director de Operaciones Estratégicas en esta empresa, puso en valor el papel de la innovación aplicada a la trazabilidad: “La tecnología blockchain nos permite ofrecer transparencia absoluta en nuestras marcas, compartiendo con el consumidor todo el viaje del aceite con un código QR único en cada botella”.
La inauguración del encuentro corrió a cargo del rector de la UJA, Nicolás Ruiz, resaltó que "la Universidad de Jaén asume, por responsabilidad y, sobretodo, por convicción, liderar este tipo de iniciativas, porque están enfocadas a fomentar el estudio y la investigación en cualquier ámbito que afecte a nuestro olivar". Como ejemplo del compromiso de la institución académica con el sector oleícola, apuntó que sólo en la última década, la UJA ha desarrollado proyectos internacionales muy relevantes en este ámbito, como por ejemplo, Olivares Vivos y Olivares Vivos+ (programa europeo LIFE), Sustainolive (programa europeo PRIMA), Soil O-live (programa Horizonte Europa) y Living Soil (programa Horizonte Europa).
Junto al rector participaron en la inauguración de este encuentro el director general de Agricultura de la Comisión Europea, Koen Dillen; la delegada territorial de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural, Soledad Aranda; el diputado provincial de Agricultura y Ganadería, Francisco Javier Perales; el director del Instituto Universitario de Investigación en Olivar y Aceites de Oliva (INUO), Juan Bautista Barroso, y la alcaldesa de Úbeda, Antonia Olivares.
Por su parte, la conferencia inaugural de esta cita internacional, “Retos en la mejora de la salud del suelo en la Unión Europea”, fue impartida por el prestigioso científico Panos Panagos, miembro del Centro Común de Investigación de la Comisión Europea, que aportó la visión institucional sobre la situación y las principales problemáticas de la olivicultura sostenible y la producción de aceite de oliva en Europa.
Durante las dos jornadas del evento se desarrollaron sesiones de trabajo temáticas sobre la salud del suelo y la degradación de la tierra; la biodiversidad y los servicios ecosistémicos; el control de plagas y la mitigación del cambio climático; la gestión del agua y la eficiencia de los recursos; las prácticas sostenibles para el futuro de la industria del aceite de oliva; y la calidad del aceite de oliva, energía y huella de carbono.
Así, Úbeda acogió a investigadores y representantes de Universidades de todo el mundo, como la de Yale en EEUU, Udine o Bolonia en Italia, Helénica Mediterránea en Grecia, Montpellier en Francia así como representantes de empresas o instituciones como la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), el Consejo Oleícola Internacional (COI), el Instituto de Agricultura Sostenible (IAS-CSIC), Deoleo, Oleaphen, IFAPA, el Centro de Investigación de Montanha o Andaltec.
Además el programa contó también con presentaciones orales y exposición de pósters de trabajos científicos, sesiones de cata de aceites y actividades todas encaminadas a promover el intercambio académico y la colaboración entre los participantes.
II Concurso Internacional Soil O-Live
Por su parte, el premio al Mejor Suelo ha recaído en la almazara Agropecuaria El Puerto (Pegalajar, Jaén). Este suelo ha presentado valores de respiración superiores a nueve microgramos de CO2-C/gramo y hora, valores que son comparables a los encontrados en bosques mediterráneos bien conservados, indicando una elevada actividad microbiana.