La consejería de Agricultura, Pesca y Alimentación ha procedido hoy al pago de un anticipo de la ayuda a la producción de aceite de oliva correspondiente a la campaña 2002-2003 por un valor de 2’8 millones de euros, que se destinarán a más de 7.700 expedientes de solicitud de ayuda. <br /><br />Este pago se suma a los cerca de 12 millones de euros que la conselleria ya había tramitado para el pago de las ayudas a 35.000 expedientes asociados a Fedeprol, completándose así el abono del anticipo de todas las solicitudes que, a fecha de la tramitación, se encuentran correctos, que son alrededor de 43.000 en la Comunidad Valenciana. <br /><br />Así, de estos más de 7.700 expedientes, 5.231 pertenecen a oleicultores no asociados a una organización de productores reconocida, mientras que 2.524 pertenecen a oleicultores asociados, cuya subvención será recibida a través de las cooperativas y sociedades agrarias de transformación asociadas. <br /><br />Cabe destacar que para el cálculo del pago de las ayudas se ha tenido en cuenta el importe del anticipo fijado por Bruselas, que en el periodo transitorio en el que nos encontramos es de un importe bruto de 1’32 euros por kilo de aceite, que tras la detracción del 2’2% para la financiación de medidas de calidad y la penalización provisional del 29% por sobrepasamiento de la cantidad garantizada para España, resulta finalmente para esta campaña un anticipo de 0’91 euros por kilo de aceite con derecho a ayuda. Este anticipo supone el 90% de la ayuda total y cuyo importe definitivo será conocido alrededor de la segunda quincena de julio. <br /><br />Este sistema de apoyo al sector se mantendrá, según la última reforma aprobada, hasta la campaña 2004/2005 inclusive. A partir de ese momento entrará en vigor una nueva modalidad de apoyos al sector que actualmente se está perfilando. <br /><br />En este sentido, la conselleria de Agricultura, Pesca y Alimentación esta actuando con todos los recursos necesarios para garantizar un nivel de ayudas superior al que se está percibiendo en los últimos años y que permita mejorar las rentas de los oleicultores valencianos, contribuyendo así al mantenimiento de la población en los pueblos de interior ya que en muchos casos constituye la única fuente de ingresos, además de su importancia medioambiental.