Drones, satélites y sensores hiperespectrales para la monitorización y el control de la Xylella fastidiosa

Durante la jornada demostrativa del proyecto, celebrada recientemente, representantes de instituciones, la comunidad investigadora, asociaciones agrícolas y organizaciones de productores, representadas por Coldiretti Puglia y Pugliaolive, han presentado las tecnologías de monitorización agrícola más innovadoras: desde la monitorización fitosanitaria hasta la gestión de los recursos hídricos y la prevención de enfermedades. Así, según ha informado Unaprol, se ha hecho especial hincapié en los resultados del proyecto FIXYLL, cuyo objetivo es apoyar diversas áreas de intervención para combatir la Xylella fastidiosa. Desde la identificación de olivos sanos en zonas con fuerte infestación bacteriana, hasta la verificación del cumplimiento de las regulaciones regionales para el cultivo obligatorio del suelo y la verificación de la erradicación de los árboles infectados, la jornada ha supuesto “una oportunidad crucial para el debate entre todas las partes interesadas, incluidos los olivareros de las zonas afectadas, que a diario se enfrentan a los daños causados por la bacteria”. Y es que “la rápida intervención en los brotes es un elemento estratégico clave para prevenir la propagación de la enfermedad”, ha subrayado Alfonso Cavallo, presidente de Coldiretti Puglia y consejero de Unaprol, quien ha añadido que “el objetivo es estudiar los olivares desde arriba e identificar los primeros signos de la enfermedad, que aparecen con el aclareo y el secado de las copas, que pierden su tradicional color verde y adquieren un color arena opaco, como si estuvieran cubiertas de telarañas”. Desde el primer equipo canino anticontagio hasta los drones para detectar árboles enfermos desde el aire, desde los injertos para salvar olivos centenarios hasta las investigaciones de laboratorio para estudiar nuevas variedades resistentes, pasando por la incesante búsqueda del insecto vector que propaga la enfermedad, Coldiretti y Unaprol han resaltado que trabajan en un amplio espectro de proyectos para combatir la bacteria. El "grupo de trabajo canino anti-Xylella", según ha explicado Coldiretti, está formado por dos Jack Russell, un pastor belga malinois, un bloodhound, un labrador retriever y un springer spaniel inglés, lo cuales están completando su formación y serán desplegados en puertos, aeropuertos y viveros para utilizar su olfato con el fin de detectar plantas infectadas y detenerlas antes de que lleguen a las fronteras nacionales o se comercialicen. Y si bien se ha recurrido al injerto de variedades resistentes para salvar olivos centenarios, reforzando sus defensas, la investigación, según esta organización, está probando la capacidad de algunas variedades de olivo para reaccionar a la bacteria en ambientes protegidos y aislados, además de las ya identificadas: leccino, FS17, lecciana y leccio del corno.