La vuelta al cole ha sido más aburrida de lo que nos creíamos. Con las esperanzas puestas a finales de julio en un pellizco de movimiento en el mercado, el resultado ha sido un mes, cómo no, apático y con casi imperceptibles movimientos, que si se han producido, han sido a la baja en la mayoría de las provincias productoras.<br />Es más, el número de operaciones de compraventa se desplomó a mediados de agosto, según Efeagro, un 60%, mientras que los precios permanecían planos. Así, con gran parte de la cosecha ya vendida y los mercados “de vacaciones”, los operadores se encontraban a la espera de mejores tiempos cuando se reanude la actividad comercial de cara a la próxima campaña, que se plantea parecida a la actual.<br />Por lo que respecta al último mes, según la citada agencia de noticias, también se ha derrumbado el número de operaciones y el volumen de transacciones, apenas 209 movimientos (-47,75%) y 18.020 toneladas, un 60% menos.<br />Aunque, aparentamente, las cifras nacionales de exportaciones y comercialización siguen aumentando mes a mes, como conocíamos a principios de agosto gracias a los datos de la Agencia para el Aceite de Oliva (AAO) que anunciaba que a 30 de junio la comercialización total -mercado interior aparente más exportaciones- alcanzó 1.027.400 toneladas, aumentando un 7% con respecto a la campaña anterior y un 13% sobre la media de las cuatro últimas.<br />Sin embargo, en los mercados reinaba una monotonía que no se reactivaba ni concordaba con estas cifras. En los mercados de Jaén y Granada, la situación era más floja que a finales de julio, con poca actividad y escasísimas operaciones, lo que dejaba de balance dos meses fatales para la moral comercial en las provincias andaluzas. Los precios, además, oscilaban ligeramente a la baja con un lampante a 270 ptas./kg. (1.623 €/t.); un botella a 285/290 ptas./kg. (1.712/1.743 €/t.); un refinado a 290 ptas./kg. (1.743 €/t.); y, finalmente, un virgen extra a 310/330 ptas./kg. (1.863/1.983 €/t.).<br />El mercado cordobés también paso un mes tranquilo y más flojo que los anteriores. Los precios fluctuaron ligeramente sobre los mismos niveles alcanzados en julio, con un botella que se establecía en las 285/295 ptas./kg. (1.712/1.773 €/t.); unos lampantes a 270 ptas./kg. (1.623 €/t.); unos refinados a 283/285 ptas./kg. (1.701/1.712 €/t.); y unos vírgenes extra a 315/335 (1.893/2.013 €/t.).<br />En Sevilla, excepto algunas operaciones puntuales de algún camión suelto, el mercado se encontraba sin actividad. Los precios se establecían con un lampante a 267/268 ptas./kg. (1.605/1.611 €/t.); mientras el botella lo hacía en las 290 ptas./kg. (1.743 €/t.); el refinado en las 283/285 ptas./kg. (1.701/1.713 €/t.); y el virgen extra se situaba en las 320/350 (1.923/2.103 €/t.).<br />La poca operatividad en Málaga provocaba desconfianza y monotonía en el mercado, con unos refinables que volvían a situarse a 275 ptas./kg. (1.653 €/t.); así como los botella, que también continuaban inamovibles a 295/300 ptas./kg. (1.773/1.803 €/t.). Los vírgenes extra eran los únicos que oscilaban hasta establecerse a 320/340 ptas./kg. (1.923/2.043 €/t.).<br />El mercado castellano-manchego se reactivó con los movimientos que empezaba a realizar Italia en la provincia, y por ello los precios se mantuvieron estables, con un virgen extra a 320/330 ptas./kg. (1.923/1.983 €/t.); y el virgen para envasar a 300/315 ptas./kg. (1.803/1.893 €/t.).<br />Una vez más, continuaron en blanco los mercados de Tarragona, Lleida, Valencia y Bajo Aragón debido a la falta de operaciones, a los que se les sumó la inoperatividad de Extremadura.<br />Finalmente, Barcelona se encontraba paralizada, por lo que volvía a presentar todas las cotizaciones en los mismos niveles, con un botella a 315 ptas./kg. (1.893 €/t.); un virgen para envasar a 287 ptas./kg. (1.725 €/t.); y un virgen extra a 338 ptas./kg. (2.031 €/t.)