El Departamento de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Generalitat catalana y representantes del sector del aceite de Cataluña han diseñado <br />un modelo para repartir las ayudas de la nueva Política Agraria Común (PAC) para garantizar un mínimo de 300 euros por hectárea. <br /><br />De esta manera, se da satisfacción a las demandas del sector y se cumple un mandato del Parlamento que requería que las ayudas se acercaran al máximo a los 300 euros por hectárea. Las dos partes implicadas se reunieron este lunes en la Delegación de Agricultura en Lérida.<br /><br />La ayuda que cobrarán los agricultores según su zona de producción es la suma del 95% de subvención desvinculada de la producción que establece la PAC, más el 5% restante ligado a la producción. <br /><br />Este 5% son los poco más de seis millones de euros que la Generalitat puede repartir según los criterios que se acordaron. <br /><br />El objetivo es que las zonas de más bajo rendimiento se vean lo menos perjudicadas posible por el reparto que contempla la nueva PAC.<br /><br /><b>Complemento de 25 euros por hectárea</b><br />Así, sólo tendrán acceso a ayudas de este 5% ligado a la producción las zonas que estén por debajo de los 1.250 kilos de olivas por hectárea. Además, tendrán un complemento de 25 euros por hectárea las zonas con una pendiente pronunciada y con una baja pluviometría.
