La entrada de dos nuevos miembros a la Unión Europea -Rumanía y Bulgaria- el pasado mes de enero supone para España la eliminación de las barreras de exportación hacia los citados países, en general, y una oportunidad para la introducción de determinadas compañías alimentarias, en particular. Así lo refleja un estudio elaborado por la Federación de Industrias de Alimentación y Bebidas (FIAB) y el Ministerio de Agricultura y Pesca (MAPA).<br /><br />La patronal de empresas de alimentos y bebidas española anima, por ello, a las compañías de aceites, aceitunas y vinos a que estudien modos de exportación, a pesar de que tanto Rumanía como Bulgaria son también países productores de estos alimentos.<br /><br />Precisamente, el hecho de que sean consumidores importantes de estos productos “hace prever un aumento de las ventas, ofreciendo interesantes oportunidades para las empresas españolas”, según ha explicado el director de Promoción Exterior de la Federación de Industrias de Alimentación y Bebidas (FIAB), Jaime Palafox.<br /><br />En general, ha añadido que todos los sectores tienen sus oportunidades pero las empresas de aceite de oliva parecen contar con mayores posibilidades de éxito, según refleja un estudio un estudio elaborado por la FIAB y el MAPA.<br /><br />Según las conclusiones del estudio, Rumanía y Bulgaria cuentan en determinados sectores con una industria local muy poco desarrollada, lo que ofrece la oportunidad de invertir directamente o asociarse con alguna empresa local y fabricar localmente. “Son dos países que se encuentran actualmente en un periodo de cierta estabilidad económica, con un consumo que aumenta gracias a unos crecimientos importantes del PIB y una relativa baja tasa de inflación”, ha recordado Palafox.<br /><br />Ambos cuentan con tasas de crecimiento por encima del promedio europeo; y así, la economía rumana creció un ocho por ciento en 2006, mientras que la búlgara lo hizo en un seis por ciento. <br /><br />Una de las ventajas que Palafox destaca de esta iniciativa es que algunas empresas españolas cuentan con la experiencia exportadora vivida tras la anterior ampliación (Polonia, República Checa y Hungría), tres de los países en los que más ha crecido la exportación entre 2000 y 2005. Asimismo, la industria española entraría en ambos mercados al mismo tiempo que la del resto de los países comunitarios y, por lo tanto, en igualdad de condiciones que sus competidores.<br /><br />Sin embargo, como inconvenientes, Palafox destaca los hábitos alimenticios de estos países, que son muy distintos de los nuestros, "ya que se alejan de lo que conocemos como la dieta mediterránea".<br /><br />En cuanto al modo para adentrarse en estos mercados, el director de Promoción Exterior de la FIAB señala que cada empresa debe utilizar su propia estrategia. Así, mientras que algunas pueden utilizar la exportación del producto, como puede ser el caso del aceite de oliva, las empresas de artículos de gran consumo (lácteos, cárnicos o galletas) pueden optar por cualquier línea de negocio que vaya más allá de la habitual, como una sociedad de riesgo compartido.<br /><br /><a href= http://www.mercacei.com/foros/index.php target= “blank”> <b>Opine sobre esta noticia en nuestro foro</b></a><br />