México se ha mostrado dispuesto a llevar a cabo “algún tipo de acuerdo” para solucionar la disputa que mantiene con la Unión Europea (UE) en el seno de la OMC por las cuotas compensatorias que los mexicanos imponen al aceite de oliva europeo importado. Esta es una prueba más de la buena intención que ha manifestado México por mantener la buena relación que tiene con la UE, país que está dispuesto a explorar opciones, desde la buena voluntad de ambas partes.<br /><br />Sin embargo, el país ha reiterado que confía en que las investigaciones que realizó, y con base en las que impuso derechos compensatorios al aceite europeo, “se apegan a la normativa vigente” de la Organización Mundial del Comercio (OMC), contrario a lo que opina la UE.<br /><br />Los hechos se remontan al mes de mayo de 2004, cuando las autoridades comerciales de México impusieron derechos compensatorios de entre 0,4 centavos y 0,73 centavos de dólar por kilo (dependiendo del fabricante) al aceite de oliva virgen, refinado y preparado a base de mezclas procedente de la UE, por considerar que unos subsidios europeos a la aceituna perjudican a su incipiente industria nacional de aceite.<br /><br />Y es que, según ha asegurado la titular de la Unidad de Coordinación de Negociaciones Internacionales de la Secretaría (Ministerio) de Economía de México (SE), Luz María de la Mora, “estos subsidios europeos afectan especialmente al aceite que proviene de España e Italia”.<br /><br />De la Mora ha explicado que los fabricantes de aceite mexicanos "han dejado de producir los mismos volúmenes que antes" a causa de los subsidios que supuestamente da la UE al sector.<br /><br />Por su parte, la UE argumenta que México basó su decisión de gravar las exportaciones de aceite de oliva europeo en una investigación que no se inició ni se realizó de conformidad con las reglas de la OMC tanto por cuestiones de procedimientos como de fondo.<br /><br />Para el bloque de 27 países europeos la disputa, que resolverá próximamente un grupo de expertos de la OMC, es de gran importancia por su magnitud económica, pero también porque pone en evidencia ciertos problemas sistemáticos de las investigaciones mexicanas. Asimismo, el futuro de esta decisión afecta principalmente a España, que detenta una participación del 96,5% en el mercado de aceite de oliva mexicano, según cifras de la Oficina Comercial de la Embajada española en México.<br /><br />Según cifras del Consejo Oleícola Internacional (COI), México consume 11.000 toneladas de aceite de oliva al año e importó en 2006 unas 10.000 toneladas, el doble que en 2000. Unos datos que indican que este país produjo el pasado año 2.000 toneladas de aceite, 500 menos que las que fabricó cada año entre 2002 y 2005.<br /><br />Entretanto, el consejero económico y comercial de la Embajada española en México, Mariano Muela, ha argumentado a Efe que España, el mayor productor de aceite de oliva del mundo, “manifestará su interés” de que la tasa que imponen los mexicanos “sea levantada”. Según Muela, el gravamen afecta solamente al aceite que exporta por debajo de determinado precio la UE hacia México, para evitar que no se venda “excesivamente barato”, pero que dado que en 2005 hubo una mala cosecha de aceituna en Europa el aceite se vendió más caro, razón por la cual no ha afectado la evolución del comercio”.<br /><br />El consejero económico de España, país que exporta 28,6 millones de dólares del producto a México, afirma que "no está claro" que unos subsidios que la UE dio a la producción de aceituna en 2003 se sigan transfiriendo al precio del aceite de oliva en la actualidad.<br /><br /><a href= http://www.mercacei.com/foros/index.php target= “blank”> <b>Opine sobre esta noticia en nuestro foro</b></a><br />