El empleo de biodiésel en los vehículos está siendo una de las cuestiones más tratadas en temas medioambientales y energéticos. A pesar de que los aceites usados en cocina ya han empezado a utilizarse como materia prima para la producción de este tipo de biocarburante, persiste la idea de que los aceites puros y vírgenes son mejores y emiten menos CO2. <br /><br />Por ello, el equipo de investigadores de la Universidad de Castlla- La Mancha, liderado por Magín Lapuerta, ha medido las emisiones con el objetivo de comprobar si el grado de agotamiento y estrés térmico del aceite de cocina tiene algún efecto, probándolo en un motor diesel comercial en condiciones usuales de carretera.<br /><br />Para ello, los investigadores han realizado un estudio comparativo entre un combustible diésel convencional (de petróleo), un biodiésel obtenido a partir de aceite virgen y dos fabricados a partir de aceites usados en cocina. Estos dos últimos proceden de hospitales (con un grado de agotamiento térmico y de ensuciamiento menor) y de recogedoras (restaurantes y puntos limpios, entre otros). <br /><br />El trabajo, que se publica en el último número de la revista <i>Bioresource Technology</i>, demuestra que los aceites usados en cocina son una buena materia prima para la producción de este biocarburante desde el punto de vista de las emisiones de motor. Asimismo, no presentan diferencias significativas respecto a otros aceites, como los de colza, girasol o soja. <br /><br />“Con el biodiésel elaborado a base de aceite usado para cocinar se consiguen reducciones en las emisiones (respecto al diesel fósil) como las que se consiguen con otro biodiésel procedente de aceites sin usar”, explica el autor principal de la investigación, Magín Lapuerta. Añade el científico que el hecho de que el aceite utilizado se haya requemado y haya tenido otros usos en cocina no le quita calidad como materia prima.<br /><br />Aunque los aceites usados se hayan mezclado en un 30 y un 70% con otro combustible diesel, la eficiencia del motor no se ha visto afectada, según indica el trabajo. No obstante, los investigadores señalan que se ha observado un ligero incremento del consumo de combustible con la concentración del citado biocombustible.<br /><br />“El objetivo principal del trabajo ha sido estudiar los efectos de las mezclas de biodiésel, medidas en términos de masa, efectos ópticos (opacidad del humo) y tamaño de la distribución de tamaños de partículas”, especifican los científicos. En los resultados se observó un descenso marcado en la opacidad del humo y en otras emisiones gaseosas cuando las concentraciones de biodiésel incrementaban.<br /><br /><B>Biodiésel a partir de aceites usados en cocina</B><br /><br />El interés de utilizar aceites usados en cocina como biodiesel reside en el bajo coste que supone. La mayoría del aceite usado se deshecha en el sistema de alcantarillado de las ciudades, suponiendo un daño claro para el medio ambiente y la salud humana al contaminar ríos, lagos, mares y aguas subterráneas. Su uso como combustible diesel permite abaratar costes de producción y evitar la contaminación de ciertas zonas.<br /><br />En el caso de la utilización en motores diesel, los aceites usados en cocina tienen propiedades similares a los no usados ya que, tras un proceso para reducir el contenido de ácidos grasos en los usados, ambos reducen las emisiones contaminantes del motor.<br /><br />El estudio proporciona argumentos para “motivar” a la sociedad y a los sectores privados a mejorar la recogida y el reciclaje de los aceites usados de cocina para producir biodiésel. Las fábricas de estos combustibles son, según el autor, “una buena alternativa para la reutilización del aceite usado en cocina”. <br /><br /><a href= http://www.mercacei.com/foros/index.php target= “blank”> <b>Opine sobre esta noticia en nuestro foro</b></a><br />