Un estudio desarrollado conjuntamente por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y la Universidad de Granada ha determinado que las morfoespecies de mariquitas (<i>coccinélidas</i>) pueden usarse como una herramienta rápida y eficaz para evaluar el impacto que tienen los sistemas orgánicos frente a los no-orgánicos en la gestión del olivar.<br /><br />La preocupación actual por el impacto medioambiental y la creciente demanda de aceite de oliva ecológico ha originado la necesidad de desarrollar indicadores eficaces para medir la salud de los ecosistemas agrarios en las regiones olivareras. Uno de los indicadores de salud y sostenibilidad es la abundancia y biodiversidad de invertebrados, especialmente de artrópodos. <br /><br />Así, para distinguir entre sistemas de cultivo ecológico, convencional e integrado, los investigadores escogieron estos coleópteros, dado que son los más predominantes en el ecosistema del olivar y cumplen todos los requisitos para ser un bioindicador eficaz, porque son una especie abundante y bien distribuida; son relativamente fáciles de recoger e identificar; se conocen su biología y ciclos de vida; y son relativamente inmóviles. <br /><br />El estudio se llevó a cabo durante dos años, en el que se recogieron mariquitas de tres grandes zonas olivareras, una por cultivo. Los resultados indicaron que la riqueza y variedad de mariquitas fue mayor en los cultivos orgánicos (ecológicos) que en los no-orgánicos (integrado y tradicional). Las conclusiones del estudio permiten identificar de forma simple, pues, las tierras cultivadas con técnicas más respetuosas con el medio ambiente. <br /><br /><a href= http://www.mercacei.com/foros/index.php target= “blank”> <b>Opine sobre esta noticia en nuestro foro</b></a><br />