En concreto, la Oficina del Representante de Comercio de Estados Unidos (USTR) aseguró que “la Organización Mundial de Comercio (OMC) ha encontrado repetidamente que los subsidios de la Unión Europea (UE) a Airbus han causado efectos adversos en Estados Unidos”, por lo que ha comenzado un proceso para identificar los productos europeos “a los que se pueden aplicar derechos adicionales hasta que la UE elimine esas subvenciones”. La USTR estima que el daño de los subsidios de la UE es de 11.000 millones de dólares cada año, una cifra que está sujeta a un arbitraje en la OMC, cuyo resultado se espera para este verano. “Este caso ha estado en litigio durante 14 años, y ha llegado el momento de la acción. La Administración se está preparando para responder de inmediato cuando la OMC emita su conclusión sobre el valor de las contramedidas de Estados Unidos", ha señalado el representante de Comercio de los Estados Unidos, Robert Lighthizer. La USTR publicó una lista preliminar de productos de la UE que podrían ser objeto de derechos adicionales y que incluye alimentos como el aceite de oliva. España es actualmente el principal proveedor directo de aceite de oliva a Estados Unidos, superando en volumen a las exportaciones italianas. En torno al 70% de las exportaciones españolas a Estados Unidos se concentran en 11 productos, representando los cuatro primeros el 50%. En concreto, el primer producto exportado en importancia es el aceite de oliva, que representa el 24% de las ventas al país norteamericano, según datos de 2017 del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA). En el caso del aceite de oliva, el 12% de las exportaciones totales de este producto de España se destinaron al país norteamericano. Asimismo, las ventas de este producto a Estados Unidos aumentaron un 64% respecto a 2015 y se situaron en 2017 en 116.379 toneladas por valor de 473,05 millones de euros. Tras los aranceles impuestos a la importación a la aceituna negra española y ante el temor de que se haga extensivo al aceite de oliva, en una reciente entrevista con Mercacei, el ministro de Agricultura, Luis Planas, aseguraba que "la situación del aceite de oliva, hoy por hoy, es diferente, dado que la producción nacional de Estados Unidos es muy limitada, su consumo interno es estable y se abastece fundamentalmente de importaciones".