Según la organización agraria, se trata de un seguro con un coste asumible, gracias a las subvenciones estatales, que se aplican directamente al contratar el seguro, y las autonómicas, que se devuelven al año siguiente al de la contratación. A su juicio, la “buena” cosecha que se presenta en términos generales hace que la contratación tome un especial interés por el daño que el granizo puede causar. En este sentido, Asaja-Jaén ha explicado que en los últimos años y en determinadas zonas de esta provincia las tormentas de pedrisco han golpeado con bastante intensidad dejando daños “muy fuertes” en distintas explotaciones, que “desgraciadamente no contemplaban entre sus gastos de cultivo el seguro de olivar, por lo que no han tenido ningún otro tipo de compensaciones directas”. Asimismo, desde la organización han precisado que cuentan con la posibilidad de contratar también un seguro de “sobreprecio”, que indemniza el daño con un 30% más del valor de la aceituna, situándose la indemnización en 0,52 euros por cada kilo perdido.