Recientemente se ha publicado un estudio internacional en el que ha participado el Instituto de Protección Vegetal Sostenible del Consejo Nacional de Investigación de Italia (Cnr-Ipsp), que reporta evidencia "significativamente más sólida" que la conocida hasta ahora sobre el origen de la Xylella fastidiosa en la región italiana de Puglia, donde la bacteria se ha adaptado y ha destruido millones de olivos.