Hacía mucho que los mercados oleícolas españoles no comenzaban un nuevo año en una situación similar: precios por los suelos; falta absoluta de operatividad, provocada por la ausencia de compradores; al tiempo que crecía la velocidad a la que entraba el aceite en las fábricas, con el consecuente problema de cabida que esto implicaba y la preocupación de los agricultores por la falta de financiación y solvencia. <br />Estos temas eran los que más preocupaban al sector y los que ocupaban las reuniones de las asociaciones más representativas, al tiempo que pedían la inmovilización del aceite y la posible búsqueda de financiación.<br />En Jaén y Granada, por ejemplo, el mercado se encontraba sin operatividad mientras los operadores estaban a la espera de que la situación se normalizara. Los precios no se modificaban a excepción del botella que se establecía en las 280 ptas./kg. (1.682 €/t.). Los lampantes se situaban a 255/260 ptas./kg. (1.533/1.653 €/t.); los refinados a 275/280 ptas./kg. (1.653/1.683 €/t.); y, finalmente, los vírgenes extra a 300/310 ptas./kg. (1.803/1.863 €/t.). <br />Los operadores del mercado cordobés se encontraban “agobiados” por la falta de financiación y la capacidad de las fábricas. Esta saturación se agravaba con la poca operatividad. Los lampantes cotizaban a 255 ptas./kg. (1.533 €/t.); los botella a 280 ptas./kg. (1.683 €/t.); los refinados a 275 ptas./kg. (1.653 €/t.); y los vírgenes extra a 295/305 ptas./kg. (1.773/1.833 €/t.).<br />En Sevilla, la paralización del mercado producía la repetición de todas las cotizaciones. Así, el lampante permanecía a 250/255 ptas./kg. (1.503/1.533 €/t.); el botella a 280 ptas./kg. (1.682 €/t.); el refinado a 275 ptas./kg. (1.653 €/t.); y, finalmente, el virgen extra a 300/325 ptas./kg. (1.803/1.953 €/t.)<br />En Málaga, el mercado estaba falto de operatividad debido a la alta producción de las fábricas. El mercado se encontraba saturado y los precios también repetían cifras con un virgen extra a 320/350 ptas./kg. (1.923/2.103 €/t.); un lampante a 260 ptas./kg. (1.563 €/t.); y un botella a 280/285 (1.682/1.712 €/t.).<br />En Castilla-La Mancha, la situación era caótica debido a la falta de cabida. Por ello, los precios se mantenían en blanco. <br />El mercado en Tarragona y Lleida estaba parado. En Garrigues y Siurana ya se había terminado la cosecha con una producción menor que la de la campaña pasada.<br />Barcelona, por el contrario, se mostraba parada con un refinado a 294 ptas./kg. (1.767 €/t.); y un botella a 309 ptas./kg. (1.857 €/t.).<br />En Extremadura, seguía sin haber mercado y las operaciones estaban totalmente paralizadas. Todas las calidades se encontraban sin cotización. Y en esa misma situación se volvía a hallar el mercado del Bajo Aragón.<br />La Comunidad Valenciana repetía precios, en un mercado sin operaciones, con un botella a 265 ptas./kg. (1.592 €/t.); y un virgen extra a 280/285 ptas./kg. (1.682/1.712 €/t.).