Los pasados 5 y 6 de julio, el Instituto Internacional San Telmo celebraba el último de los cuatro módulos de los que se compone su actual Programa de Alta Dirección de Empresas de la Cadena Agroalimentaria (ADECA). <br /><br />En el transcurso de estas jornadas, el profesor y director general adjunto del Instituto, Julio Audicana Arcas, ha puesto de manifiesto el reto común al que se enfrenta la Cadena Agroalimentaria de nuestros días: considerar al consumidor como elemento esencial de la estrategia. Estamos en mercados donde comer es un deseo, no una necesidad y donde los patrones de consumo son cada vez más individualistas –según Audicana-, además, el porcentaje del gasto de la renta familiar destinado a la alimentación está descendiendo drásticamente, reduciéndose a menos de la mitad en los últimos 30 años. Es necesario, por tanto, hacer un esfuerzo por entender y seguir al consumidor actual y venidero. <br /><br />Un consumidor que otorga una importancia creciente al tiempo (proximidad y rapidez –"food service"–, no guisar –"meal solutions"-, etc.); a la salud (alimentos funcionales, seguridad alimentaria,…); y está dispuesto a pagar más por un mayor valor añadido (precios a la baja, escepticismo con las marcas). <br /><br />Se apuntan nuevos hábitos de compra y consumo, cada vez más alejados de los canales clásicos: crecimiento "fast-food", "meal solutions", compra desde casa... Estamos ante un consumidor "infiel, polígamo y camaleónico", que visita 3,2 tiendas de media para completar su cesta de la compra y al que hay que "escuchar, más que oír", de modo que podamos desarrollar estrategias que nos permitan "atraer, vender más,… y, sobre todo, que vuelvan". <br />