La inactividad que se viene observando desde principios de marzo en el mercado se ha generalizado a todas las calidades del aceite y a todas las zonas productoras. Los envasadores disponen de reservas suficientes y, lógicamente, no están dispuestos a seguir adquiriendo producto a corto plazo salvo lo que puntualmente vayan necesitando. <br />Mucho más teniendo en cuenta el descenso acusado que se viene produciendo en el consumo y la tendencia a la baja que se observa en los precios en origen, cuyo género ha ido rebajando su cotización de forma leve pero continua en las últimas semanas.<br />El mercado de Andalucía registra una ausencia total de operaciones, con cisternas sueltas que no sirven para establecer precios ni tan siquiera orientativos. Tanto es así, que se han llegado a realizar ventas aisladas de virgen para envasar a 620 ptas./kg. (3.730 €/t.) pero también a 580 ptas./kg. (3.487 €/t.), por lo que nadie sabe a ciencia cierta cuál es el precio real del aceite en estos momentos. En Córdoba y Sevilla sólo se registran operaciones aisladas con los refinados, que esta semana se sitúan en torno a las 630/635 ptas./kg. (3.789/3.816 €/t.). Sin embargo, también este dato es tan sólo orientativo, como cualquier otra cotización que se pueda dar.<br />De momento, no hay un volumen de compradores que pueda normalizar el mercado. La demanda se encuentra abastecida por las adquisiciones que ha ido realizando en otros países como Grecia o Italia, por lo que todo el mundo está a la espera de que los envasadores den salida a todo ese aceite que ahora tienen en su poder. En esta situación, sólo la esperada llegada de los compradores italianos podría producir un nuevo repunte en un mercado que ya hace cálculos para ver en qué condiciones y cuánto producto habrá disponible al comienzo de la próxima campaña.<br />En las zonas de Cataluña y el Bajo Aragón también esperan las importaciones italianas como agua de mayo, y confían poco en el mercado interno, que ya está abastecido y les sigue proporcionando una ausencia total de movimiento. En Toledo, se encuentran en la misma situación, con todo completamente parado y sólo animado por las escasas adquisiciones de los importadores transalpinos.<br />Extremadura y la Comunidad Valenciana viven una semana más de paro forzoso, algo que resume la situación actual del mercado nacional del aceite de oliva.<br />En este contexto, un nuevo aplazamiento en la votación de la UE sobre la posible apertura de un contingente extra de importación de 80.000 toneladas a terceros países ha provocado aún más confusión. La opinión generalizada del sector es que, finalmente, no se aprobará dado el panorama actual; con unos datos de producción algo más positivos de lo que se esperaba y con unas previsiones halagüeñas para la próxima cosecha debido a las últimas lluvias. En este sentido, todo apunta a que los precios en origen continuarán en próximas fechas con su ligera tendencia a la baja, mientras que en los lineales se mantendrán en la línea actual, ya que un descenso del P.V.P. acarrearía muchos problemas de existencias de cara al futuro enlace de campaña.