La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) activaba el pasado miércoles en las cuatro provincias de Andalucía occidental -Cádiz, Córdoba, Huelva y Sevilla- la alerta amarilla por riesgo de fuertes lluvias y vientos de hasta 70 kilómetros por hora. En todos los casos, esta alerta era por riesgo de lluvias que podrían arrojar 15 litros por metro cuadrado en una hora, y hasta 40 en el intervalo de doce horas.<br />A pesar de ello, la Federación Andaluza de Empresas Cooperativas Agrarias en Jaén, Faeca-Jaén, mostraba su preocupación por la escasez de lluvias de los últimos meses, que “puede afectar de forma significativa a la inminente campaña olivarera e incluso a la campaña del próximo año”, y que no se compensaban con unos pocos días de precipitaciones.<br />Según explicaba la federación en un comunicado, sus técnicos han constatado que el estrés hídrico está afectando de forma significativa al olivar de secano de la provincia de Jaén, además de aquellos olivares con dotaciones de riego de socorro, por lo que temen que los datos del aforo elaborado por la Junta de Andalucía, que establecía una campaña similar a la anterior, sean sensiblemente inferiores. En estos momentos, “con la debilidad extrema del olivo, la aceituna no ha desarrollado de manera normal el estado de formación de aceite (lipogénesis), por lo que las tan ansiadas lluvias podrán ayudar a recuperar el árbol, pero poco al desarrollo de la aceituna y rendimiento en aceite de la misma”, indicaban.<br />Lo cierto es que el mercado continuaba muy paralizado, también a expensas todavía de conocer las cantidades de las primeras inmovilizaciones del almacenamiento privado. Jaén y Granada se mantenían pendientes de las compras y ventas que se podían generar a través de este mecanismo, aunque el comprador se mostraba escéptico y no encontraba justificación a la subida de precios por este motivo. Así, todas las cotizaciones repetían con un refinado y un botella, ambos a 290 ptas./kg. (1.743 €/t.); un lampante a 270/275 ptas./kg. (1.623/1.653 €/t.); y un virgen extra a 300/320 ptas./kg. (1.803/1.923 €/t.). <br />En Córdoba se comenzaba a fabricar arbequino con un tiempo dominado por la lluvia y la bajada de temperaturas, lo cual resultaba positivo para la calidad del zumo. Se realizaban compras puntuales pero no interesaban todavía los nuevos aceites. Los lampantes continuaban a 270/275 ptas./kg. (1.623/1.653 €/t.); los botella a 285/295 ptas./kg. (1.712/1.773 €/t.); los refinados se situaban a 288/290 ptas./kg. (1.731/1.743 €/t.); y los vírgenes extra seguían a 305/325 ptas./kg. (1.833/1.953 €/t.).<br />En Sevilla, la situación era la misma que la semana anterior, con operaciones contadas y precios mantenidos. El lampante permanecía sin cotización, mientras el virgen extra cotizaba a 320/350 ptas./kg. (1.923/2.103 €/t.). Por su parte, el botella seguía a 290/300 ptas./kg. (1.743/1.803 €/t.); y el refinado se establecía otra vez a 290/295 ptas./kg. (1.743/1.773 €/t.).<br />En el mercado malagueño el movimiento era muy escaso, con unos lampantes a 270/275 ptas./kg. (1.623/1.653 €/t.); unos botella a 280/295 ptas./kg. (1.682/1.773 €/t.); y unos AOVEs a 320/330 ptas./kg. (1.923/1.983 €/t.).<br />En Castilla-La Mancha se reactivaba la operatividad en el mercado, con un virgen extra a 330 ptas./kg. (1.983 €/t.); y un virgen para envasar a 295/310 ptas./kg. (1.773/1.863 €/t.).<br />Continuaban en blanco los mercados de Tarragona, Lleida y Bajo Aragón -aunque comenzaban a fabricar algunas cooperativas-; al tiempo que Barcelona se estabilizaba con un refinado a 290 ptas./kg. (1.743 €/t.); y un botella a 311 ptas./kg. (1.869 €/t.).<br />En Extremadura el mercado se volvía más lento, a pesar de la producción de arbequino, aunque los precios se situaban a niveles superiores a los que el comprador estaba dispuesto a pagar. Los lampantes permanecían en la Comunidad extremeña a 268/270 ptas./kg. (1.611/1.623 €/t.); mientras, sus vírgenes para envasar continuaron a 285/290 ptas./kg. (1.712/1.743 €/t.); y los AOVEs se mostraban sin cotización.<br />