El Centro de Investigación y Formación Agraria de Córdoba (CIFA) lleva una década trabajando en un proyecto para mejorar los sistemas de regadío mediante la tecnología de los satélites que, finalmente, parece comenzar a ofrecer resultados en olivares del Genil-Cabra (Córdoba). <br /><br />La iniciativa utiliza imágenes digitales obtenidas del satélite para determinar mediante sistemas de simulación las necesidades de los distintos cultivos. <br /><br />Así, esta herramienta conseguirá que los agricultores puedan planificar un uso óptimo del agua según el cultivo y la zona geográfica de que se trate. <br /><br />El objetivo final, según el delegado provincial de Innovación, Ciencia y Empresa, Andrés Luque, es que los servicios locales de asesoramiento al regante puedan ofrecer una recomendación personalizada a los agricultores sobre las necesidades reales de agua de sus cultivos. <br /><br />Esta investigación es una de tantas que se han venido realizando en los últimos años con la intención de adaptar los calendarios de riego a la escasez de agua que hay en la cuenca. Los primeros datos del CIFA en dos parcelas de olivar de Santaella destacan que en una de las fincas se aplicaron 1.500 metros cúbicos de agua y se obtuvo una producción de 5.300 kilos, mientras que en la segunda, ese mismo año no se tuvieron en cuenta los calendarios de riego y pese a emplear 2.000 metros cúbicos se obtuvieron 4.800 kilos de aceitunas.