Los agricultores andaluces podrán avisar a través de una aplicación móvil de la Red de Alerta de Información Fitosanitaria (RAIF) acerca de cualquier posibilidad de riesgo de Xylella fastidiosa que detecten en sus explotaciones, empleando la geolocalización de su teléfono móvil y la posibilidad de adjuntar fotos para que sean analizadas de manera inmediata.