Olivares tradicionales: cómo y por qué protegerlos

Apadrinaunolivo.org ha recordado que desde hace ocho años viene defendiendo este modelo tradicional. Así, gracias al apoyo anual de madrinas y padrinos, la entidad ha conseguido la recuperación de 15.000 olivos reactivando la actividad económica, no solo en el área de Oliete (Teruel). Además, con la construcción en 2016 de la primera almazara social y solidaria y la producción del AOVE Mi Olivo , ha logrado extender a otras áreas el impulso del sector del olivar, a través del pago justo a otros agricultores.

Según ha precisado, mantener estos olivares centenarios en activo ya ha mitigado la suma de 6,9 toneladas de CO2. “La recuperación de olivos tiene un efecto más inmediato que plantar ejemplares nuevos que necesitan una media de 10 a 15 años para captar CO2 de forma significativa”, ha añadido. Para seguir protegiendo la calidad e impacto de la agricultura en Oliete, Apadrinaunolivo.org cuida los procesos de mantenimiento con técnicas preventivas y tratamientos naturales para evitar el uso de pesticidas.

También ha subrayado que el tipo de agricultura que aplica se enmarca dentro de las directrices europeas de agricultura ecológica, lo que representa “un respeto por las plantas y el suelo, haciendo los trabajos mecánicos imprescindibles y controlando las posibles plagas de forma natural mediante productos ya presentes en la naturaleza”.

Por otro lado, la entidad ha recordado que los efectos climáticos, la sequía y otros fenómenos meteorológicos extremos como las olas de calor pueden tener efectos en la ecología y la fisiología del cultivo del olivo. En su opinión, “un olivar tradicional va a suponer una menor agresión ambiental, donde su mantenimiento y cultivo conservan la calidad de la tierra, frena la desertización y contribuye a la lucha contra el cambio climático por su elevada capacidad de absorción de CO2".

A su vez, según ha resaltado, los olivares tradicionales utilizan varietales autóctonos, perfectamente adaptados a sus climas y suelos. Desde Apadrinaunolivo.org han puesto en valor la variedad empeltre, típica de la zona aragonesa donde se sitúa Oliete, “evitando así la pérdida de esta variedad endógena que se veía amenazada por el abandono y despoblación”.

Finalmente, ha señalado que otra de las razones de la excesiva mecanización es la pérdida de mano de obra, siendo la falta de trabajo agrícola uno de los principales motivos de despoblación en las áreas rurales y, con ello, las tradiciones locales. Para Alberto Alfonso Pordomingo, co-fundador de Apadrinaunolivo.org, “observar como Oliete no disfrutaba de sus tradiciones por el éxodo rural que iba sufriendo por el abandono de los olivares fue el principal motivo para poner la solución. A través de los apadrinamientos para la recuperación de los olivares se generan empleos con prácticas laborales justas para el fomento de la comunidad local, así como el asentamiento de las familias y nuevos repobladores”.