El pasado 2 de julio, el consejero de Agricultura andaluz, Luis Planas, informaba sobre el acuerdo alcanzado con el sector del olivar para que se incluyan algunas mejoras en el plan de acción comunitario del aceite de oliva, un documento que se envió el mismo día al Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente con el objetivo de que Bruselas tenga en cuenta los intereses de esta Comunidad.<br />Planas destacó que el documento es fruto de una “defensa de los intereses de Andalucía que se está haciendo de la mano del sector porque juntos somos más fuertes”.<br />Por este motivo, también se acordó crear una mesa de trabajo estable que fortalezca la capacidad de interlocución ante el Gobierno central y Europa.<br />El Consejero detalló que Andalucía cuenta con 1,5 millones de hectáreas de olivar, que el aceite es el producto más exportado y que este sector genera 22 millones de jornales anuales, es decir, el 35% del empleo agrario.<br />Asimismo, resaltó la necesidad de que se lleve a cabo un trabajo conjunto con el fin de que el plan recoja medidas que permitan garantizar la viabilidad del sector, englobando tanto al olivar de aceite como al de aceituna de mesa; al tiempo que defendió que éste disponga de un presupuesto diferenciado para lograr sus objetivos porque “nos jugamos el futuro de 250.000 familias olivareras de 300 municipios”, según Planas.<br />Precisamente, para abordar este plan, tuvo lugar un encuentro al que asistieron representantes de la Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (Asaja), la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG), la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA), la Federación Andaluza de Empresas Cooperativas Agrarias (Faeca), la Federación Española de Industriales Fabricantes de Aceite de Oliva (Infaoliva), la Asociación Española de la Industria y el Comercio Exportador del Aceite de Oliva (Asoliva) y la Asociación Nacional de Industriales Envasadores y Refinadores de Aceites Comestibles (Anierac).<br />El Consejero de Agricultura calificó el plan de acción comunitario como un documento “necesario y bienvenido” pero que no responde a las necesidades del sector porque carece de un presupuesto específico y de medidas a corto plazo.<br />Además, según precisó, el plan contiene “afirmaciones de carácter general sobre el sector en España” que no se comparten desde Andalucía, como la alusión a una sobreproducción en lugar de hablar de desequilibrio de los mercados.<br />Entre las propuestas andaluzas, el Consejero recalcó la necesidad de dar solución a corto plazo al problema de los precios, para lo que se propone la revisión de mecanismos de activación del almacenamiento privado “ágiles, objetivos y adaptados” a la producción y al mercado, así como el establecimiento de procedimientos regulados que permitan a los productores disponer de herramientas para adecuar la oferta a la demanda.<br />Por su parte, los mercados oleícolas salieron momentáneamente de su letargo y, durante la pasada semana se encontraron más firmes de lo que nos tenían acostumbrados últimamente. Precisamente, en Jaén y Granada el mercado se comportaba con más firmeza, sobre todo en el lampante, a pesar de la falta de oferta. Así, el lampante se remontaba ligeramente hasta las 265/270 ptas./kg. (1.593/1.623 €/t.); mientras que el botella se mantenía a 275/280 ptas./kg. (1.653/1.682 €/t.); y el virgen extra a 290/300 ptas./kg. (1.743/1.803 €/t.). Por su parte, el refinado se incrementaba hasta las 280/285 ptas./kg. (1.682/1.713 €/t.). <br />En Córdoba, el mercado también se encontraba más firme debido al crecimiento de la demanda del lampante, por lo que su cotización se situaba en torno a las 265/270 ptas./kg. (1.593/1.623 €/t.). Mientras tanto, a pesar de que se retraía un poco la oferta, el botella se alzaba hasta las 275/285 ptas./kg. (1.653/1.713 €/t.); mientras que el refinado lo hacía a 280/282 ptas./kg. (1.682/1.695 €/t.); y, finalmente, el virgen extra se mantenía a 290/300 ptas./kg. (1.743/1.803 €/t.).<br />Sevilla seguía dominada por la apatía y lentitud del mercado, por lo que el lampante repetía precio a 265 ptas./kg. (1.593 €/t.); el botella se establecía en las 280/285 ptas./kg. (1.682/1.713 €/t.); el refinado en las 285 ptas./kg. (1.713 €/t.); y, finalmente, el virgen extra permanecía a 290/300 ptas./kg. (1.743/1.803 €/t.).<br />En Málaga, los envasadores permanecían cubiertos y sin necesidad de comprar, por lo que el botella cotizaba, una vez más, a 270/280 ptas./kg. (1.623/1.682 €/t.); el virgen extra lo hacía a 285/310 ptas./kg. (1.713/1.863 €/t.); y el lampante a 265 ptas./kg. (1.593 €/t.).<br />El mercado castellano-manchego continuaba pesado aunque se retiraba aceite comprado anteriormente. El virgen extra se ofertaba a 290/300 ptas./kg. (1.743/1.803 €/t.); y el botella a 275/285 ptas./kg. (1.653/1.713 €/t.).<br />En Barcelona, la falta de operaciones mantenía el refinado a 277 ptas./kg. (1.665 €/t.); el botella a 295 ptas./kg. (1.773 €/t.); y el virgen extra a 320 ptas./kg. (1.923 €/t.). Se realizaba alguna operación suelta en Tarragona.<br />Por su parte, continuaban en blanco los mercados de Extremadura, Comunidad Valenciana y Aragón.