Los consumidores centrarán su interés en 2018 no sólo en los aspectos saludables de los ingredientes de los productos de alimentación, sino también en el etiquetado, la forma de producción y el packaging, según un estudio de la consultora
Innova Market Insights. Por su parte, las empresas de alimentación deberán apostar por productos más saludables y personalizados, diversificar sus exportaciones y conquistar nuevos mercados emergentes. Un gran desafío que a la vez supone una magnífica oportunidad.