EVOO day

Resulta que este político era un enamorado del olivo y del aceite de oliva. Tanto era así que dejó frases como esta para la posteridad: “El olivo es, con seguridad, el mejor regalo del cielo”. Como hijo de agricultores, Jefferson idealizaba al pequeño agricultor y propietario independiente como ejemplo de las virtudes republicanas y desconfiaba de las ciudades y los financieros. De hecho, la visión del presidente sobre la fortaleza de Estados Unidos recaía en que ésta era una nación agrícola de pequeños agricultores ocupándose de sus propios asuntos en contraposición a la horrenda Europa industrializada de aquel entonces (1790). Erudito y polímata, Jefferson se consagraría, entre otras cosas, como horticultor, líder político, arquitecto, arqueólogo, paleontólogo, músico, inventor y fundador de la Universidad de Virginia, declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Cuando el presidente John F. Kennedy dio la bienvenida a la Casa Blanca a los 49 ganadores del Premio Nobel del 62, afirmó: “Creo que esta es la colección más extraordinaria de talento y del saber humano que jamás se haya reunido en la Casa Blanca, con la posible excepción de cuando Thomas Jefferson cenaba solo”. El tercer presidente estadounidense cultivaba una imagen que le valió el apodo de “hombre del pueblo”. Los más cercanos a él aseguraban que durante aquellas veladas en las que se veía sorprendido por la quietud de la Casa Blanca, le gustaba pasear por aquellos majestuosos pasillos saludando al servicio en traje de andar por casa, con bata y zapatillas. Probablemente, antes habría cenado algo ligero aliñado con aceite de oliva, un alimento que consideraba una “necesidad para vivir”. Hoy en día desconocemos lo que cenan a diario Barack y Michelle Obama durante sus últimos días en Washington. Sí sabemos que, de vez en cuando, se dan un homenaje gracias al chef asturiano José Andrés, encargado de elaborar los menús para las grandes ocasiones, en los que, conociéndole, no faltará el aceite de oliva virgen extra. Quién sabe si habrá algo flotando en el aire de aquella residencia con despacho oval para que los presidentes más destacables hayan sucumbido al AOVE... Lo que sí está claro es que el olivo siempre ha estado ligado a la simbología de esta nación. No olvidemos que el defensor del escudo de EEUU es un águila que sostiene un grupo de 13 flechas en su garra izquierda (en referencia a los 13 Estados originales) y una rama de olivo en su garra derecha, simbolizando que Estados Unidos tiene “un fuerte deseo por la paz, pero siempre estará listo para la guerra”. Aunque no se especifica por ley, la rama de olivo se representa generalmente con 13 hojas y 13 aceitunas, representando de nuevo los 13 Estados originales. En la composición figura también el lema nacional: E Pluribus Unum, que significa en latín “de muchos, uno”. En menos de un mes, un nuevo presidente recorrerá los pasillos de la Casa Blanca. Muchos rezan para que, por primera vez, sea ella en vez de él. Nosotros también, Trump parece más de hamburguesas y demás fast food.

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