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La venganza de Trump: el sector oleícola español responde

La venganza de Trump: el sector oleícola español responde

viernes 04 de octubre de 2019, 14:42h

Tras conocer que el Gobierno de Estados Unidos comenzará a aplicar aranceles al aceite de oliva y a las aceitunas de origen español a partir del 18 de octubre, desde Mercacei hemos recabado la opinión de diversos representantes del sector, que expresan su malestar ante esta medida que supone "un agravio comparativo para el aceite de oliva español frente a otros países productores y una muy mala noticia para la marca España".

Gonzalo Guillén, CEO de Acesur

"¿Quién está detrás de esa decisión y en base a qué presiones o a qué lobby responde?"

Hay que ser prudentes hasta conocer los extremos de la decisión y cómo será su aplicación. Por ejemplo, ¿afecta a los aceites de países terceros pero envasados en España en régimen de TPA, así como a los aceites de origen español pero envasados en otros países como Italia o Portugal?, ¿se aplican los aranceles a partir del día 18 a las entradas en aduana de Estados Unidos o es a los embarques que salgan de España a partir de ese día?, ¿qué ocurre cuando haya aceites/lotes de varios orígenes, incluido España en los envasados?

Adicionalmente, podemos preguntarnos muchas más cosas y a a título de curiosidad, ¿a quién beneficia esta decisión que afecta sólo al envasado en España: a los italianos, a los envasadores locales en USA, a las nuevas plantaciones de California/Australia?, ¿por que sólo afecta el arancel a los aceites envasados procedentes de España?, ¿qué ocurre con el resto de países de la UE?, ¿a ellos no?, ¿quién está detrás de esa decisión y en base a qué presiones o a qué lobby responde?, ¿donde ha estado el Gobierno de España?, ¿ha intentado o podido presionar?, ¿hay miedo a España y a su potencial futuro como productor de volumen y máxima calidad y “competitividad”?, ¿hay miedo a que la marca España gracias, entre otras cosas, a las promociones y campañas de comunicación de la Interprofesional del Aceite de Oliva Español pudiese ir ganando espacio, conocimiento y credibilidad en las mentes de los consumidores americanos?...

En cualquier caso, es un día triste para España porque vemos cómo somos la única nación perjudicada y castigada en un producto “indiferenciado” a nivel de países productores dentro de la UE.

Antonio Luque, presidente de Dcoop

"Estamos en radical desacuerdo respecto a que este sector pague el pato de una guerra aeronáutica que no tiene que ver con nosotros"

Es una mala noticia porque va a afectar al sector y no va a ayudar a que se desarrollen con normalidad las relaciones comerciales a Estados Unidos, que consume el 10% del aceite de oliva del mundo. También nos ha sorprendido que el arancel solo afecte a España, por lo que pedimos a todas las administraciones que hagan lo posible para que no juegue en desventaja frente a otros países competidores como Italia o Grecia.

Estamos en radical desacuerdo respecto a que este sector pague el pato de una guerra aeronáutica que no tiene que ver con nosotros.

Cualquier cosa que se haga en un mercado afecta al mercado global. Para Dcoop, el valor de todas las exportaciones a Estados Unidos se sitúa en 120 millones de euros anuales, fundamentalmente de aceite.

Una vez que se concrete esta medida tendremos que ver la letra pequeña y esperamos que se haga todo lo posible por revertir esta situación y que el sector español tenga las mismas reglas de juego que otros países.

Álvaro Olavarría Govantes, director gerente de Oleoestepa

"Es un agravio tremendo para la producción e industria oleícola española"

Es un agravio tremendo para la producción e industria oleícola española que acarrea un problema comercial grave. Los problemas de competencia comercial industrial entre los mercados de la UE y Estados Unidos no puede pagarlos la agricultura, ganadería e industria agroalimentaria.

La Administración europea tiene que resolver esta situación para evitar perder los logros comerciales alcanzados por España en los últimos años en el mercado de mayor consumo de los países no productores.

Gabriel Estévez, responsable de Aceites de Grupo Sovena

"Ya conocíamos el fuerte lobby de California que ha presionado a las sucesivas administraciones"

Es un asunto muy desafortunado el hecho de que productos agrícolas paguen por subsidios de otros sectores, aunque era algo previsible, ya que la contrapartida por la parte de la UE sobre las ayudas a Boeing no se conocerá hasta principios del próximo año, dejando a la Administración americana en bandeja de plata satisfacer muchas de las peticiones históricas de los productores domésticos (2020 será año electoral…). Ya conocíamos el fuerte lobby de California que durante la última década ha presionado a las sucesivas administraciones para implementar cualquier tipo de barrera a las importaciones.

En cualquier caso pienso que el hecho que el granel esté fuera y sea un 25% es un mal menor, pues es una rara excepción cualquier porcentaje que no sea el 100% en estos casos.

Aún quedan cuestiones abiertas hasta la publicación final con la aprobación de la Organización Mundial de Comercio como la fecha de aplicación, si se da un periodo de gracia -o no- sobre contenedores en tránsito, los controles a establecer por la Administración americana para el cumplimiento de los mismos e incluso el periodo en el que se aplicarían estas medidas (que lógicamente podrían ser permanentes) para evaluar de forma precisa el alcance de esta decisión.

Consoli Molero, gerente de Colival

"La imposición de un arancel del 25% supondrá que España salga del mercado en la comercialización de nuestro producto estrella"

La imposición de un arancel del 25% supondrá que España salga del mercado en la comercialización de nuestro producto estrella y en beneficio de otros países productores que no se ven afectados.

La guerra comercial a base de aranceles es perjudicial para el motor económico de nuestros municipios. España se esfuerza por ofrecer al mercado americano siempre la mejor relación calidad/precio, algo que, de imponer un arancel específico, puede suponer la pérdida de cuota de mercado ante la entrada de otros países que comercialicen sus aceites más baratos.

El consumidor estadounidense también saldrá perdiendo si se aprueban estos aranceles, pues subirán los precios de los productos con origen español. En el caso del aceite, por ejemplo, los consumidores podrán optar por comprarlo más caro o renunciar a él y sustituirlo por otro tipo de grasas, no tan saludables como el aceite de oliva virgen extra.

José Manuel Bajo, presidente de la Sectorial Nacional del Aceite de Oliva Virgen con Denominación de Origen

"Se trata de una pésima noticia que nos debe hacer reflexionar"

Sin duda es una pésima noticia que nos debe hacer reflexionar sobre una realidad: el mercado es incierto y sus condiciones varían, sí o sí, a lo largo del tiempo, por lo que debemos considerar está certeza y prepararnos para afrontarla.

De ahí la importancia, que venimos defendiendo desde las DOPs, de apostar de forma decidida por la “diferenciación y la calidad” con mayúsculas y olvidar está práctica tan habitual de conquistar mercados únicamente siendo los más baratos.

Debemos variar el rumbo, darle valor a la marca España y a nuestras marcas, dotándolas de las mayores distinciones desde el punto de vista de la seguridad alimentaria, la calidad medioambiental y organoléptica, y otorgando un importantísimo peso al origen.

Para una marca posicionada por precio, un arancel del 25% sobre el precio de importación, la situaría, literalmente, fuera del mercado frente a sus competidores del mismo segmento, ya que el impacto de la subida absorbería los márgenes del distribuidor, que optaría por un producto similar y de una procedencia sobre la que no se hubiesen aplicado los aranceles.

Para una marca de fabricante, en la que el precio es secundario y de mayores márgenes, es evidente que el impacto sería mucho menor, y además se contaría con la fidelidad del consumidor.

José María Penco, director de AEMO

"Si se consuma esta medida, supondrá un intenso chaparrón sobre un suelo ya mojado"

Si se consuma esta medida, supondrá un intenso chaparrón sobre un suelo ya mojado que se suma a las dificultades estructurales que tenemos. Precisamente en los últimos años las marcas españolas ganaban cuota de mercado en Estados Unidos a un gran ritmo y esto supondrá un frenazo en seco e inmerecido.

Además parece haberse dado la tormenta perfecta, ya que la medida afectaría solo a España, de entre los productores europeos, lo que reforzaría a nuestros competidores y además es aplicable a los aceites de mayor valor, es decir, los envasados. No sabemos aún si afectará a los aceites que siendo envasados fuera de nuestra frontera sean de origen español, circunstancia que será muy importante debido a que diversos industriales españoles tienen fuera envasadoras. Nos parece especialmente triste que los principales afectados sean marcas de productores e industriales españoles que llevan años luchando por hacerse un lugar en el mercado estadounidense desde el valor, es decir, la botella, el virgen extra y la calidad, y además incidirá especialmente sobre aquellos que no tienen medios para envasar en otros países.

La solución a medio plazo pasará por intensificar las acciones de promoción aún más en los nuevos mercados, porque esa cuota que perdamos la tendremos que recuperar. Pero hagámoslo desde la calidad y desde el valor, que es el único camino, y convenzámonos que todos debemos invertir más dinero para ello.

Enrique Delgado, secretario de Infaoliva

"El gran perjudicado es el agricultor y el aceite español"

Desde nuestro punto de vista, y con independencia de que el gran perjudicado es el aceite español, hay una parte importante de perjuicio hacia los pequeños y medianos industriales que han abierto envasadoras en mercados muy locales en Estados Unidos.

Son almazaras que le dan un valor añadido a sus aceites y que generan puestos de trabajo que, en estas circunstancias, y si no son competitivas se perderán.

El gran perjudicado es el agricultor y el aceite español.

Juan Gadeo, presidente de Grupo Interóleo Picual Jaén

"Es un agravio comparativo para el aceite de oliva español frente a otras regiones productoras y una muy mala noticia para la marca España"

La posible aplicación de aranceles del 25% al aceite español podría tener graves consecuencias para nuestro sector. Desde la deslocalización de grandes grupos envasadores a otros países donde no se aplique aranceles, así como la pérdida de competitividad y por tanto de cuota de mercado de las marcas españolas que no puedan deslocalizar su actividad de envasado.

Sin duda, es un agravio comparativo para el aceite de oliva español frente a otras regiones productoras y una muy mala noticia para la marca España. Ahora todos, producción, industria y administraciones deberíamos aunar esfuerzos para evitar o impedir la posible aplicación de aranceles.

Es inaceptable que frente a un consumo de 300.000 toneladas, el aceite español tenga una barrera de entrada respecto a otros países productores. Con esta posible medida también se demostraría que las políticas de volumen y precios bajos para obtener cuotas de mercado son ineficaces, ya que un consumidor de valor podría asumir un 25% más, pero un consumidor de precio no permite un incremento del 25%.

Rafael Alonso Barrau, director comercial y de exportación de Oro del Desierto

"Consideramos la medida inoportuna, gravosa e injusta"

En Oro del Desierto hemos diversificado la venta de nuestros AOVEs en mas de 30 países y ninguno de los mercados supera el 6% de nuestras ventas, por lo que la potencial merma de ventas a Estados Unidos nos afectaría menos como marca y empresa, puesto que tenemos otros mercados que pueden absorber la potencial bajada de ventas en ese país. Sin embargo, somos conscientes de la gravedad del asunto y consideramos la medida inoportuna, gravosa e injusta puesto que se aplica solo a España y no a otros competidores como Italia y Grecia, que tomarán ventaja y beneficio de ello, comercializando los aceites de oliva españoles con ese 25% de diferencial a su favor una vez los importen, embotellen y revendan a Estados Unidos.

El Gobierno, el Ministerio y la UE deberían tomar cartas rápidamente en el asunto para frenar lo que nos parece un auténtico disparate para el sector olivarero español, que por otro lado no pasa por sus mejores días debido a los bajos precios.

Rafael Picó, director de Asoliva

"Un 25% de arancel para el aceite de oliva supone que estemos fuera del mercado"

Un 25% de arancel para el aceite de oliva supone que estemos fuera del mercado. Simplemente, no podemos vender a partir del 18 de octubre ningún aceite de oliva envasado en el mercado de Estados Unidos con exportación directa desde España.

Los graneles suponen una ventaja para el envasador local americano que podrá seguir comprando a España sin ese arancel y compitiendo con los aceites españoles, con lo cual esta medida supone el mal de unos y la alegría de otros.

Es un problema político que tiene que tener una solución política. He pedido a la Secretaria de Estado de Comercio una reunión urgente para tratar este tema y que nos informe sobre lo que se va a hacer.

Espero y pido que si hay unas negociaciones se llegue a acuerdos por parte de la UE y que todo se solucione; si no, la marca España desaparecerá en el retail. Algunos pensarán que puede haber un aumento de exportaciones de graneles a Estados Unidos, pero quien se va a hacer con el retail son las marcas italianas, griegas, portuguesas o tunecinas.

Cualquier decisión de Estados Unidos es un ejemplo a imitar y esperemos que no se lleve a cabo por parte de otros países porque nos estaríamos jugando cantidades importantes de exportación de aceite de oliva. Desde España se exportan 120.000 t. al país norteamericano como exportación directa. Italia no está perjudicada pero lo que compre origen España sí se vería afectado y, si fuera así, estaríamos hablando de 230.000 toneladas que afectarían a toda la cadena del sector.

Luis Miguel Algar, director de Compras de Deoleo

"De golpe y plumazo te hace perder competitividad frente a otros países"

En principio creo que se debe mantener mucho la calma, no entrar en pánico e ir observando la evolución final y la normativa. Estamos ante un borrador, con bastantes interpretaciones, y algo ambiguo.

Evidentemente es una mala noticia, ya no solo para el sector, sino para España y la marca España, pues de golpe y plumazo te hace perder competitividad frente a otros países.

Pero sin entrar más en detalle, ya que se está gestando y hay que estudiar el alcance, tal y como está redactado, todo indica que el arancel será al origen del aceite, independientemente del país donde se envase, con lo que afectará directamente al aceite de oliva español. Habrá que ver si al final se pagará por el porcentaje de aceite de oliva español que lleve la composición -que sería lo lógico- o lo harán extensivo a la totalidad -por aquello, de que sea difícil demostrar la trazabilidad real de la misma-.

Por ahora es pronto para entrar a analizar lo que van a hacer los distintos operadores (industria) que tienen mercado en Estados Unidos. Estamos ante un borrador, y el día 14 hay una reunión donde se le dará un carácter más definitivo. Mientras, debemos mantener la calma sin dejar, por supuesto, de revindicar lo injusto y anómalo de la decisión. Una vez aclarado todo, podremos hacer un análisis de cómo afectará a la industria.

Cristóbal Gallego, presidente de Jaencoop

"Se trata de una forma de proceder que no tiene ninguna lógica y es discriminatoria"

Se trata de una forma de proceder del Gobierno de Trump que no tiene ninguna lógica y es discriminatoria. Además, es un elemento adicional que contribuye a perturbar el mercado, que ya de por sí está siendo difícil y complicado esta campaña en la que se ha obtenido una importante producción.

Es una situación que nos daña y nos perjudica, y supone un duro ataque a España, que cuenta con un presente y un futuro en el sector del aceite de oliva, y creemos que no debe ser utilizado intencionadamente contra los productores españoles.

Hay que destacar cómo afectará a las pequeñas y medianas empresas españolas, que han realizado fuertes inversiones en promoción de su producto en Estados Unidos.

Francisco Siles, director comercial de Oleum Hispania

"Es una medida totalmente injusta y desproporcionada"

Oleum Hispania se suma, como no puede ser de otra forma, al malestar generalizado del sector del aceite de oliva y otros sectores agroalimentarios, por una medida que entendemos totalmente injusta y desproporcionada. Que productos tan estratégicos para España como el aceite de oliva, las aceitunas, el queso o el jamón “paguen” las subvenciones que ha recibido el sector aeronáutico europeo durante años es un despropósito inmenso. A esto sumamos el hecho de que se penalice al envasador, que lleva años haciendo un esfuerzo económico enorme por introducir su aceite allí. Esta medida sólo puede traer consecuencias negativas para el sector oleícola español y, por tanto, para la economía española.