Durante la clausura del acto de presentación del Anuario de la Agricultura Familiar de la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA), Planas ha anunciado que después de verano el Ministerio convocará a todos los interlocutores del sector y a las Comunidades Autónomas para avanzar en los contenidos del proyecto de ley, que es uno de los objetivos prioritarios de la legislatura. “Estamos absolutamente comprometidos con esta tarea”, ha reiterado.
En el proceso de consulta pública previa lanzada por el MAPA en marzo se han recibido 67 aportaciones de entidades y organizaciones del sector y sociedad civil. La futura norma tiene ante sí el reto de actualizar la Ley de Modernización de Explotaciones de 1995 y abordar aspectos relevantes como la fiscalidad, el relevo generacional y la igualdad de género.
El ministro ha destacado que el modelo de agricultura familiar español está muy vinculado al territorio y se caracteriza por la convivencia entre productores a tiempo total, que tienen su renta exclusivamente dependiente de la agricultura y la ganadería, y otros a tiempo parcial o como actividad complementaria. "Unos y otros dan vida a nuestros pueblos, al medio rural y eso no está retribuido", ha resaltado.
Por ello, ha explicado que uno de los objetivos de la ley y de la futura Política Agraria Común (PAC) será definir las entidades prioritarias hacia las que se tienen que volcar más las ayudas.