Esta pequeña mariposa, de apenas 6 mm., sigue un ciclo perfectamente sincronizado con las fases fenológicas del olivo, desarrollando tres generaciones: filófaga (hojas), ántófaga (flores) y carpófaga (frutos). Mientras los daños de la primera suelen ser limitados, las siguientes dos generaciones -especialmente la carpófaga- pueden tener un impacto devastador en la cosecha, provocando la caída prematura del fruto y pérdidas significativas de producción.
Este año, tras un invierno especialmente benigno, los niveles de población de la primera generación han sido elevados, lo que nos anticipa un escenario de presión creciente para las generaciones posteriores. En consecuencia, la intervención es más que recomendable.
En este contexto, TRIAC de Servalesa se presenta como una herramienta esencial y eficaz en el control de Prays oleae. Su formulación a base de piretrinas naturales, extraídas del crisantemo, le confiere una doble acción por contacto e ingestión, con efecto inmediato sobre Prays oleae. Esta rapidez en la acción permite reducir de forma significativa las poblaciones en momentos críticos.
A diferencia de otros productos, TRIAC ofrece una solución natural, autorizada en agricultura ecológica, sin residuos persistentes y con un perfil ambiental respetuoso. Esta característica lo convierte en un insecticida ideal para programas de manejo integrado de plagas (MIP) compatible con estrategias sostenibles.
Además, su modo de acción se adapta perfectamente a las necesidades actuales del olivicultor, ya que permite respuestas rápidas ante brotes de alta presión sin comprometer la sanidad del cultivo ni la calidad del aceite.
En resumen, este año no es momento de esperar, es momento de actuar. TRIAC representa una apuesta inteligente por un control eficaz del Prays oleae, alineado con las demandas de una agricultura moderna, productiva y sostenible. La naturaleza ha puesto las condiciones. Con TRIAC, la respuesta está en nuestras manos. Con TRIAC, game over al Prays.