Forasteros

Pero volviendo al extranjero, en la edición oceánica del famoso programa, dedicaron un intenso bloque a La Tapa, en el que uno de los chefs se dedicaba a ofrecer a los alumnos una serie de Masterclass sobre este tipo de gastronomía. En uno de los capítulos, el menú constaba de tres tapas: langostinos al ajillo, huevos con chorizo y provolone con tomate. La profesora, en este caso, no dudó en informar a los jóvenes alumnos de dónde procedía cada producto. El provolone era italiano, concretamente de Piamonte; los huevos provenían de una granja ecológica del estado australiano de Victoria; y el chorizo, de España (así, del país en general). Tras la descripción, se dispuso a preparar las tapas en orden, siendo la primera de ellas, la de langostinos. Cuál fue nuestro asombro cuando en lugar de coger la botella de aceite de oliva, abrió la nevera y sacó mantequilla, tal cual, en bloque, como si de hormigón se tratase. No debimos de ser los únicos que se quedaron atónitos. Uno de los dos alumnos preguntó extrañado: ¿Por qué para este plato no se utiliza aceite de oliva? A lo que respondió la chef: “se podría, pero a mí me gusta más el sabor de la mantequilla”. Ah, bueno, entonces vale... ¿Dónde ha quedado ese cocinero que además de buscar sus preferencias regala a su comensal sabores y salud? ¿Por qué no están ahí nuestros aceites de oliva tal y como está el provolone de Piamonte? De hecho, el comercio de aceite de oliva a este país ha disminuido durante los cinco primeros meses de la campaña 2013/14, según recoge el último informe de mercado del Consejo Oleícola Internacional (COI). Este organismo ha precisado que si se analizan las cifras en detalle, Australia registra un descenso de sus importaciones que se sitúa en torno al 16%. Puede que estemos esperando demasiado para llegar a estos países. Nos arriesgamos a que ellos se cansen de esperar. ¿Nos pasará lo mismo con Eslovaquia? El reciente estudio del ICEX: El mercado de aceite de oliva en Eslovaquia, realizado bajo la supervisión de la Oficina Económica y Comercial de la Embajada de España en Bratislava, asegura que España es líder en el mercado eslovaco con un 29% de cuota de mercado, seguida por Italia (18%). Sin embargo, advierte de que España no tiene una imagen de marca muy conocida entre el consumidor, su aceite se consume simplemente porque es aceite de oliva, no por su procedencia española. Alerta: ¿cuánto tardarán otros países en adelantarnos por la derecha sin que nos demos cuenta? No les demos la oportunidad. Hagamos marca. Nosotros lo valemos. ¡Y más que Pantene!

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