Aunque hasta la fecha no ha sido identificada en España, según ha destacado el IVIA en un comunicado, la Xylella fastidiosa es una bacteria con gran potencial de daño económico para los cultivos mediterráneos. Se dispersa mediante vectores (insectos chupadores) y ataca a diversas plantas de utilidad económica, como la vid, el olivo, el almendro, el ciruelo, el melocotonero y los cítricos, sin que existan actualmente métodos eficaces de curación. Por este motivo, en Italia y Francia solamente se ha podido actuar erradicando y quemando las plantas contaminadas y prohibiendo la circulación de plantas de las zonas afectadas.
Este Instituto ha explicado que el proyecto europeo "Xylella Fastidiosa Active Containment Through a multidisciplinary-Oriented Research Strategy (XF Actors)" tendrá una duración de cuatro años y responde a la necesidad urgente de mejorar la prevención, la detección temprana y el control de esta bacteria. Uno de sus objetivos es evaluar el potencial de diseminación de la bacteria por el territorio de la UE y establecer estrategias de prevención en las zonas libres del patógeno.
El proyecto permitirá establecer una estrategia de gestión global integrada de las enfermedades asociadas a la Xylella fastidiosa que pueda aplicarse tanto a la agricultura ecológica como a la gestión integrada, para evitar la propagación de la bacteria y controlar sus impactos económicos, ambientales y sociales.
Las acciones propuestas complementan a las previamente realizadas por el IVIA sobre esta bacteria y a las que se actualmente se realizan en el marco del proyecto europeo POnTE, en marcha desde finales de 2015, en el que colabora un consorcio de 10 países.
Este organismo valenciano ha precisado que en XF Actors participan 29 entidades de 14 países (10 de la UE más Estados Unidos, Brasil, Taiwán y Costa Rica). Están presentes instituciones de ámbito supranacional, como el Joint Research Centre de la Comisión Europea o la EPPO (European and Mediterranean Plant Protection Organisation). El presupuesto total del proyecto es de 6,9 millones de euros, financiados al 100% por la UE.
Por parte del IVIA colaboran expertos en modelización matemática, bacteriología, teledetección y sensores. Los trabajos se dividen en 10 bloques, participando el Instituto en varios de ellos y siendo el responsable del bloque denominado “Evaluación regional de riesgos para anticiparse a la amenaza e impactos de las enfermedades a asociadas a la Xylella fastidiosa”.