Durante la visita, Planas felicitó a la fundación por el nuevo impulso que le ha dado a su histórica tienda y valoró esta iniciativa enfocada a divulgar el conocimiento de las cualidades del aceite de oliva.
El ministro apostó por trabajar para incrementar la demanda internacional y abrir nuevos mercados para el aceite de oliva, puesto que apenas supone el 2% del consumo mundial de grasas vegetales. “Que sea una de las más saludables quiere decir que su capacidad de crecimiento es inmensa gracias a las tendencias, cada vez más exigentes, en el consumo alimentario”, subrayó.
En declaraciones a Mercacei, el director gerente de la FPCO, Ricardo Domínguez, destacó que esta tienda de exposición y venta es un lugar de experiencias y conocimiento que cuenta con contenidos digitales para que todos aquellos que se acerquen a este establecimiento puedan disfrutar y conocer qué hay detrás de cada botella de AOVE. “Queremos transmitir y generar experiencias y fidelizar al consumidor”, aseveró.
Además, la tienda -que cuenta con alrededor de 270 referencias y 97 marcas- se convertirá en un punto de encuentro, así como en un espacio para la cata, la educación y la formación. Asociado a ello, se desarrollará una plataforma de comercio electrónico, que estará a pleno funcionamiento de cara a Navidad, donde se ofertarán todas sus marcas, por lo que “será una pasarela más que contribuirá a que el aceite de oliva se siga conociendo en todo el mundo”.
Una nueva forma de comprar
Acorde con un nuevo consumidor más exigente y digitalizado, la tienda cuenta con una línea compleja de sistemas digitales. El primero de ellos consta de diferentes campos de filtrado -en español e inglés- a través de los cuales los clientes pueden encontrar aquellas referencias que reúnan las condiciones que buscan: marca, origen, variedad, etc. y donde puede visualizar las características de todos los aceites expuestos, así como vídeos vinculados a la marca o, incluso, recetas que el cliente puede recibir directamente en su mail.
También cuenta con otro sistema en el que a través de un lector de código de barras, aparece en la pantalla la información completa de la referencia elegida, sus características, maridajes, origen, certificaciones o el PVP.
Pero si algo llama la atención al entrar en La Comunal es la estantería que preside la tienda, donde se encuentran los 8 AOVEs destacados de la semana o la quincena. Estas ocho botellas reposan sobre una mesa digitalizada en la que al coger cada una de ellas, el cliente visualiza en la pantalla una animación del zumo en cuestión con información acerca de la marca y sus características, tanto en español como en inglés.
Sin embargo, la guinda la pone uno de los escaparates frontales de la tienda que de día es totalmente transparente y al anochecer se convierte en una pantalla que proyecta vídeos e información para los transeúntes de la calle Mejía Lequerica de Madrid.
