Yo no vendo aceite

El pasado 27 de febrero, en el marco de la World Olive Oil Exhibition, organicé y moderé la mesa redonda “Los millennials del AOVE” en la que intervinieron además de Salz, Rafael Alonso Barrau, director comercial y export manager de Rafael Alonso Aguilera; Cristina Garrido, directora de la Escuela de Cata de Aceites Los Quinientos; Mercedes Uceda, responsable de calidad de IADA Ingenieros; y José Miguel Molina, catador y responsable de calidad de Aceites Manuel Molina.

En un momento dado, hablando de cómo vender tu marca, Salz -la más novata del sector- saltó de inmediato: “Quien quiera comprar mi AOVE tiene que comprar la historia de los olivos empeltres de mis abuelos, mis años fuera de España formándome, mi valentía a la hora de volver y lanzarme a emprender; en definitiva, me tiene que comprar a mí”. Y todos asentimos. Porque nadie quiere vender AOVE ni que le compren AOVE. Todos y cada uno de los productores quieren vender su relato y “para venderlo hay que comunicarlo”, como aseveró Cristina Garrido, que también incidió en la importancia no sólo del packaging -que está más que consolidado en el sector-, sino del branding.

Cómo si no podríamos transmitir al consumidor pensamientos como el de Rafael Alonso, que emocionó a media sala afirmando que él no tenía planeado seguir en la empresa familiar, pero cuando la vida le llevó por ese camino “me enamoré del sector y ahora no entiendo la vida de otra manera”. Alonso recalcó la “obligación de mantener y mejorar el trabajo de nuestros predecesores, lo que constituye todo un reto”, contando con el respaldo de aquellos que también somos de segunda e, incluso, de tercera generación.

Es el caso de José Miguel Molina, que recomendó “rodearse de los que más saben” a la hora de entrar en el sector. Algo que compartió Mercedes Uceda -hija de Marino-, que carga consigo el apellido familiar cual monarquía milenaria. “No sé si alguna vez estaremos a la altura de nuestros predecesores, pero haremos todo lo posible por aportar lo máximo a este sector y ocupar puestos de responsabilidad, algo que todavía parece que no nos toca a los millennials ”, dijo Uceda -hija-. La que suscribe -hija de Juan- no tuvo mucho que hacer como moderadora, más que asentir y compartir.

Parece que va siendo el momento de los millennials y con estos compañeros de generación no me cabe la menor duda de que haremos cosas grandes.

Yo no vendo aceite

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