AOVE: el fichaje que le falta al Madrid

Bromas aparte -¡o no tanto!-, lo cierto es que cada vez más estudios apuntan a que el AOVE, especialmente aquellos con alto contenido en compuestos fenólicos como el hidroxitirosol o el oleocanthal, no solo es un pilar de la Dieta Mediterránea, sino un suplemento funcional natural con impacto directo en el rendimiento físico, la recuperación y hasta la agilidad mental. Y si hay un zumo que lo encarna todo, ese es el número 1 del TOP10 Healthy EVOOs de los EVOOLEUM Awards 2025: Di Molfetta Frantoiani Monocultivar Coratina, con nada menos que 777,5 p.p.m. -partes por millón- de polifenoles. Una bestia saludable. Este tipo de AOVEs no solo protegen el sistema cardiovascular, favoreciendo la oxigenación muscular y la resistencia en esfuerzos prolongados. También combaten el estrés oxidativo que genera el ejercicio intenso -esa cascada de radicales libres que mina la recuperación y agota al deportista antes del minuto 60-. De hecho, algunos compuestos del AOVE como el oleocanthal tienen efectos antiinflamatorios comparables al ibuprofeno… pero sin efectos secundarios. ¡Quizá más de uno en Valdebebas debería tomar nota! Y no es solo cuestión de piernas. Los polifenoles del AOVE atraviesan la barrera hematoencefálica -sí, como los goles de Fabián Ruiz cruzaron la portería blanca- y activan zonas cerebrales relacionadas con la memoria, la concentración y la toma de decisiones rápidas. Justo lo que echamos de menos en el medio campo madridista aquella maldita noche en París. En definitiva, hablar hoy de aceite de oliva virgen extra no es hablar de un simple condimento, sino de un bioactivo natural con impacto multidimensional: muscular, cardiovascular, cerebral. Por eso certámenes como EVOOLEUM valoran tanto las características organolépticas como la salud. Porque el AOVE no solo debe emocionar al paladar, sino mejorar la vida -y el rendimiento- de quien lo consume. Esto también lo recalca el Dr. Antonio Escribano Zafra, Catedrático Extraordinario de Nutrición Deportiva (UCAM) en un artículo de la próxima Guía EVOOLEUM 2026. Así que, ya saben, para el próximo clásico europeo, además de preparar la táctica, ajustar las rotaciones y estudiar al rival… quizás habría que añadir a la dieta unas buenas cucharadas de coratina. Y que el Mundial de Clubes de la FIFA -y los polifenoles- repartan suerte.

AOVE: el fichaje que le falta al Madrid

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