El objetivo de este aumento de crédito es poder atender todas las solicitudes que cumplen los requisitos.
Estos incentivos persiguen aumentar la competitividad del sector olivarero de Andalucía e incrementar el valor añadido de sus productos gracias a la implantación de nuevas tecnologías y al refuerzo de los controles de calidad y trazabilidad. Además, los proyectos respaldados por la Junta inciden también en la mejora del posicionamiento de los alimentos andaluces en los mercados
Para lograrlo, el Gobierno andaluz subvenciona, entre otros gastos, inversiones vinculadas a la construcción y compra de bienes inmuebles de carácter productivo. Además, también respalda costes relativos a la adquisición e instalación de nueva maquinaria y equipos que permitan mejorar la automatización de los procesos de producción e incrementar el control de calidad y trazabilidad interna.
A través de esta línea de ayudas, la Junta de Andalucía ofrece apoyo a empresas y cooperativas que en los últimos años han puesto en marcha numerosas iniciativas encaminadas a avanzar en sostenibilidad ambiental y económica; y que, además, se han visto gravemente afectadas por la sequía que viene sufriendo el territorio andaluz. Las agroindustrias olivareras están apostando por la innovación y por la incorporación de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) como vía para impulsar la calidad de su oferta y ampliar el cuidado del entorno natural donde se ubican sus instalaciones al reducir el impacto de la actividad productiva, según ha destacado el Gobierno regional.
La Junta ha resaltado que el aceite de oliva es parte de la identidad cultural de Andalucía, que es actualmente la mayor región productora de aceite de oliva del mundo. Además, la actividad agroindustrial ligada al olivar genera más de 250.000 empleos en Andalucía, sumando puestos de trabajo directos e indirectos. En el ámbito medioambiental, los olivos contribuyen a luchar contra la erosión del suelo, a retener carbono y a proteger la biodiversidad de las zonas donde se encuentran las plantaciones.
Procesos de fusión
Por otro lado, el Consejo de Gobierno ha tomado conocimiento de la próxima convocatoria de ayudas de la Consejería de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural para fomentar procesos de fusión e integración de entidades asociativas agroalimentarias de Andalucía. Con un presupuesto 2,5 millones de euros, estas subvenciones buscan potenciar tanto la integración de pequeñas y medianas empresas agroalimentarias en otras de mayor tamaño (1,5 millones de euros) como su fusión por absorción o por la constitución de una nueva entidad (1 millón de euros).

Los beneficiarios pueden ser las sociedades agrarias de transformación (SAT) y las cooperativas de primer y segundo grado del sector agroalimentario con sede en Andalucía. Además, también pueden acceder a los incentivos las entidades mercantiles cuyo capital social se corresponda en más del 50% con una SAT o cooperativa dedicada a esta actividad económica.
Entre otros beneficios de estas subvenciones, permite aumentar el volumen de producción y comercialización, ganando capacidad de negociación frente a intermediarios, distribuidores y grandes superficies. De esta forma, pueden conseguir mejores precios de venta y condiciones más favorables en la compra de insumos o la contratación de servicios, según la Junta.
Además, la fusión de entidades permite optimizar recursos mediante el sistema de "economías de escala", reduciendo costes de producción, transporte, almacenamiento y transformación al compartir infraestructuras y servicios. Otras ventajas de la unión de las empresas son, a su juicio, la mayor facilidad para acceder a nuevos mercados nacionales e internacionales; el incremento de las posibilidades de invertir en certificaciones de calidad, en I+D+i y en marketing; y el aumento de las garantías para mantener la actividad económica a largo plazo, generando empleo más estable en las zonas rurales.