www.mercacei.com
La I Conferencia Internacional sobre la Xylella fastidiosa analiza cómo actuar contra la bacteria que amenaza el olivar mediterráneo

La I Conferencia Internacional sobre la Xylella fastidiosa analiza cómo actuar contra la bacteria que amenaza el olivar mediterráneo

jueves 19 de febrero de 2015, 14:26h

18/02/2015 - La Asociación Española de Municipios del Olivo (AEMO), ASAJA-Córdoba y el Campus de Excelencia Internación Agroalimentario (ceiA3) han celebrado este martes la primera Conferencia Internacional sobre la Xylella fastidiosa, la bacteria que amenaza al olivar de toda la Cuenca Mediterránea. La jornada ha corrido a cargo de algunos de los científicos españoles más versados en la materia y de dos de los expertos italianos que luchan en la actualidad contra este patógeno que ha provocado importantes daños en el país transalpino.

Entre las principales conclusiones extraídas de la conferencia, AEMO destaca en su blog la gravedad del problema que supone esta bacteria, de gran virulencia, “que ha secado más de 10.000ha. en Puglia y ha afectado a una zona de 200.000ha. en torno a la ciudad de Lecce”.

Asimismo, de la información aportada por los agricultores italianos se desprende que el patógeno llegó a Puglia en 2008, pero no se dató como tal hasta 2013; y es posible que llegara en plantas ornamentales de café provenientes de Costa Rica, Vía Holanda, ya que, se trata de una “vieja conocida en continente americano”.

Sobre las consecuencias del la Xylella fastidiosa en el ol¡vo, ésta tapona los vasos del xilema provocando la necrosis en las ramas, hojas, frutos y, finalmente, la muerte de todo el árbol. Además, una vez establecido en una parcela, la arrasa, actuando con más virulencia entre los meses de mayo y noviembre.

En cuanto a las subespecies que se conocen de la bacteria, son cuatro, si bien se recombinan para crear nuevas subespecies. En concreto, la que afecta al olivo italiano es un recombinación que proviene de la subespecie Pauca, presente en Costa Rica y Ecuador. La capacidad del patógeno para recombinarse supone un problema adicional para su estudio y la lucha contra su propagación.

 

La transmisión del patógeno

El vector de transmisión demostrado para la bacteria es, a día de hoy, los insectos chupadores que alcanzan al xilema; entre ellos, los más abundantes son los cicadélidos, una familia de hemípteros. También otros insectos de la misma familia, como el barrillo del olivo, parecen ser vectores. Existe la posibilidad de que las herramientas de poda puedan transmitir la bacteria, sin embargo, aún no se ha demostrado.

Además, la presencia de gramíneas y otras cubiertas vegetales podrían suponer refugio para estos insectos y, por tanto, agravar la expansión, aunque esto “no ha quedado suficientemente claro durante las ponencias”, según recoge AEMO.

 

La influencia del clima

Por lo que respecta al clima, se ha determinado que la Xylella fastidiosa se adapta perfectamente al clima mediterráneo, en especial a las zonas costeras, dado que no resiste las bajas temperaturas. Visto esto, de llegar a España, afectaría con mayor intensidad a las zonas de Levante y a las ciudades más templadas de Andalucía, como Huelva, Cádiz, el sur de Sevilla o Almería. En zonas más interiores como Córdoba y Jaén, o en mayor medida, Toledo, las temperaturas mínimas invernales harían que su adaptación fuera menos favorable.

Los modelos de probabilidad de introducción para España son bastante pesimistas, ya que se considera muy probable su aparición, antes o después, en nuestro país. Estos mismo modelos predicen que llegaría por material vegetal importado, ya sea de Italia o de países americanos, y no tiene que ser necesariamente de olivos, dada la gran cantidad de plantas huéspedes que existen, muchas de ellas asintomáticas.

 

El único arma, la prevención

De la conferencia se extrae también la conclusión de que no existen métodos de lucha contra la enfermedad efectivos, más allá de los preventivos. En cuanto a las medidas preventivas, los expertos coinciden en las siguientes: acotar la movilidad de las plantas huéspedes en las zonas afectadas, establecer barreras de seguridad y  zonas colchón; luchar lo más efectivamente que se pueda contra los vectores, especialmente los insectos cicadélidos, y minimizar las cubiertas que pudieran cobijar estos insectos. La poda racional también puede que frene la expansión.

Asimismo, la certificación obligatoria de plantas de vivero ha salido reiteradamente en las jornadas como una medida necesaria para afrontar la enfermedad en Europa. También se recomienda implementar la Xyllela fastidiosa en el pasaporte sanitario para movimientos de árboles entre fronteras intracomunitarias.

Por otro lado, parece que el patógeno afecta con mayor virulencia a los olivos más débiles, menos cuidados, por lo que los italianos recomiendan en la zona afectada tratamientos insecticidas, eliminación de hierbas, podas y otros cuidados culturales.

Por especies, aunque no ha habido tiempo para estudiar variedades resistentes, parece que hay indicios de que Leccino pudiera ser menos vulnerable a la bacteria.

 

Programa de la jornada

La conferencia fue inaugurada por el vicepresidente de la Diputación de Córdoba, Salvador Fuentes; el presidente de Asaja Córdoba, Ignacio Fernández de Mesa; el representante del cia3 y vicerrector de la Universidad de Córdoba, Enrique Quesada; y el diputado-delegado de Agricultura y Medio Ambiente de la Diputación, Julio Criado.

En el primer bloque de la mañana, moderado por el doctor Ingeniero Agrónomo y olivicultor, Cristobal Lovera, se trataron los aspectos fundamentales del patógeno, interviniendo la profesora de investigación IVIA y responsable del laboratorio de referencia de bacterias fitopatogénicas, Mª Milagros López; el catedrático de patología vegetal de la Universidad de Córdoba y profesor de investigación del Instituto de Agricultura Sostenible Consejo Superior de Investigaciones científicas (IAS-CSIC), Rafael M. Jiménez Díaz; y la investigadora científica del IAS-CSIC, Blanca Landa.

El siguiente módulo de la conferencia trató sobre la expansión del patógeno, tanto en Italia, como en el resto de países y cultivos en los que la bacteria está presente. Intervinieron en este bloque el catedrático de patología vegetal de la UCO, Antonio Trapero; el profesor de Investigación del IAS-CSIC, Alberto Fereres; el investigador responsable y coordinador de las investigaciones sobre la epidemia de Xylella en Puglia (Italia), Donato Boscia y el investigador científico del IAS-CSIC, Juan Antonio Navas.

El último módulo de la conferencia contó con la intervención la europarlamentaria Esther Herranz, que dejó de manifiesto que, tras la pregunta parlamentaria que Asaja-Córdoba hizo a través de ella a la Comisión Europea, la respuesta desgraciadamente con respecto a las medidas tomadas para proteger Europa de la bacteria son insuficientes y que la Comisión simplemente no “está en el tema”.

Además, expuso que el Grupo Popular del Parlamento defiende una lista positiva de países de los que se debería prohibir la importación de plantas. Destacó la desventaja en la que se encuentra Europa con la cada vez más restringida normativa de fitosanitarios.

La representante del Ministerio de Agricultura, Belén Martínez, por su parte, puso de manifiesto la preocupación del Ministerio con la Xylella fastidiosa y que se está trabajando pero con pocos apoyos de otros países europeos.

El fefe del Servicio de Sanidad Vegetal de la Junta de Andalucía, Ricardo Alarcón, empezó destacando que no hay que crear alarmas y que la Consejería está controlando los viveros y que su equipo ya está trabajando en la detección de la bacteria.

Finalmente, el responsable del Servicio Fitosanitario de la región de Puglia, Antonio Guario, expuso la situación de Italia y los pasos que se están dando para aislar la zona, 200.000 has es la superficie que está acordonada y de la que ya se han tomado más de 20.000 muestras.