Acesur ha destacado que está comprometida con el bienestar de los trabajadores de sus proveedores, poniendo el foco especialmente en el origen del producto, el olivar. En este sentido, ha recordado que en la campaña 2020/21 la compañía puso en marcha el proyecto GlobalGAP y su
add-on GRASP, con el que cuenta con BALAM Agriculture como
partner para el asesoramiento y el servicio técnico de los cultivos y el control de los olivos.
Acesur ha resaltado que "es pionera en su sector en este proyecto innovador, que ha evolucionado hasta controlar en esta campaña, la tercera, más de 2.000 hectáreas y más de 15 millones de kilos de aceitunas, que son verificados por organismos de certificación acreditados y sus auditores experimentados con conocimientos de los requisitos éticos, siguiendo los protocolos de GlobalGAP que implica el reconocimiento internacional para la explotación agropecuaria y su add-on GRASP, que conlleva entrevistas y evidencias in situ de los trabajadores enfocándose en su seguridad, salud y bienestar".
Según la compañía, las fincas implicadas completaron con éxito su evaluación y la estrategia ética será revisada e implementada a mayor escala para el próximo periodo de cosecha, ampliando el número de fincas a ser auditadas.
Acesur ha explicado que forma parte de los foros que discuten los desafíos y comparten las mejores prácticas en proyectos referentes a la mejor calidad del desempeño del día a día de los trabajadores del campo. El add-on GRASP cubren las principales temáticas de los principios rectores sobre las Empresas y los Derechos Humanos de la ONU y los convenios fundamentales sobre trabajo de la Organización Internacional de Trabajo (OIT).
