¿Hay millennials en el AOVE?

Si ya el año pasado reuní en ese mismo espacio a algunas de las mujeres más brillantes del panorama oleícola, el reto de este año ha sido encontrar y juntar a los millennials del AOVE para debatir el futuro del sector. Y digo reto porque, al igual que elegir sólo a seis mujeres -reconocidas productoras, coaches, catadoras, chefs, responsables de cooperativas, jefas de ventas, investigadoras y propietarias de tiendas temáticas de AOVE- para representar al mundo del virgen extra fue un desafío, encontrar a tan solo cinco millennials ha supuesto toda una odisea.

En esta mesa redonda -que moderaré el próximo 27 de febrero- participarán finalmente Rafa Alonso Barrau, director comercial y export manager de Rafael Alonso Aguilera (AOVE Oro del Desierto); María del Mar Manrique, gerente de la SCA San Vicente (AOVE Puerta de las Villas); Mercedes Uceda, responsable de calidad de IADA Ingenieros; José Miguel Molina, miembro del miembro del Panel de Cata de la DOP Priego de Córdoba; y Daniel García Peinado, chef ejecutivo del Gourmet de La Selección Española de Fútbol, conocido como el chef del AOVE.

Pero, ojo, me ha costado encontrar a coetáneos. Si no hay millennials en el sector, ¡imagínense de la generación Z! ¿Dónde está el relevo?

Hace un par de años preguntábamos acerca de este tema a los alumnos del Máster Universitario en Olivar y Aceite de Oliva de la UJA y se mostraban realmente preocupados al respecto. “Es necesario rejuvenecer el sector con gente preparada, nuevas ideas e imaginación”, aseguraba uno de ellos, mientras que otro mostraba su asombro ante la ausencia de movimiento y evolución en el sector, indicando que “se debería dar un salto en materia de digitalización”.

La Interprofesional ya lanzó hace años la brutal campaña de promoción repleta de spots dirigidos a jóvenes modernes a los que les hablaba en su lenguaje y les invitaba a consumir aceites de oliva de nuestro país.

Pero una sola iniciativa no cambia nada. Deberíamos tirarnos en plancha a reclutar a jóvenes para que se incorporen a nuestro barco o acabarémos dando vueltas sin rumbo y hundiéndonos, como los miembros de la orquesta del Titanic, en las mismas ideas y pensamientos que hace décadas.

¿Hay millennials en el AOVE?

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