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¿Cómo respira el olivar?

¿Cómo respira el olivar?

lunes 18 de septiembre de 2023, 13:05h
El proyecto BIOLIVAR mide el flujo de dióxido de carbono en el olivar, lo que permitirá determinar la capacidad de secuestro de carbono por parte del cultivo, según ha informado en su página web la Asociación Agraria Jóvenes Agricultores (Asaja) de Sevilla. El objetivo final de este proyecto puesto en marcha por esta organización es el desarrollo, validación y diseminación de una estrategia para optimizar el capital natural en olivar en producción integrada válido para una amplia tipología de explotaciones, incluyendo la herramienta para su valoración por agentes ajenos a la producción de olivar.

A través de este objetivo, el proyecto pretende ser de utilidad para los agricultores en la mejora de la gestión de la biodiversidad mediante la integración del manejo sostenible de las cubiertas vegetales, adaptándolo a los diferentes factores sociales, económicos y ambientales de los propios olivares, así como a los diferentes riesgos y tensiones asociados con la biodiversidad.

Conforme al cronograma del proyecto, y con el objetivo de mejorar el conocimiento en el sector del olivar, el equipo técnico del proyecto está llevando a cabo durante la fase de campo diferentes acciones de seguimiento de indicadores ambientales y agronómicos.

Junto al seguimiento de la biodiversidad presente en el olivar, así como de otros parámetros físicos relacionados con la fertilidad del suelo, Asaja-Sevilla ha destacado por su carácter novedoso la medición que se realiza del flujo de dióxido de carbono generado por el cultivo del olivar. Este dato, que en cierto modo permite determinar cómo “respira” una plantación de olivar, resulta del máximo interés para caracterizar los flujos de carbono y determinar la capacidad de secuestro de carbono por parte del cultivo. De esta forma, mediante la realización de prácticas culturales que optimicen dicha función, se puede contribuir a mitigar los efectos del cambio climático.

En el marco de este trabajo, cuya responsabilidad recae sobre la Estación Biológica de Doñana perteneciente al Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), se han desplegado una estación climática y equipos de medición que incorporan las últimas tecnologías y que están permitiendo la toma de datos continua, así como la generación de miles de datos que serán de gran utilidad para elaborar algunas de las recomendaciones y conclusiones del proyecto.

Asaja-Sevilla ha puesto en marcha este proyecto, que concluirá sus trabajos en febrero de 2024 y que cuenta con la participación del Consejo Superior de Investigaciones Científicas a través del Instituto de Agricultura Sostenible y la Estación Biológica de Doñana, el Consejo Regulador de la DOP Estepa, Evenor-Tech, la Universidad de Córdoba, la Universidad de Jaén, Syngenta y Asaja-Andalucía.