¿Cómo describirías el perfil sensorial de vuestros aceites a alguien que no los ha probado aún?
Cada aceite, cada variedad tiene unos matices distintos, pero de manera general nuestros aceites son equilibrados en boca con el dulzor, picor y amargor, con matices de hierba fresca, frutas y plantas aromáticas.
Morellana Hojiblanca es un AOVE vibrante y audaz, ideal para quienes buscan frescura y sabor en cada nueva aventura; y Morellana Picuda es un aceite de oliva virgen extra delicado y afrutado; mientras que Morellana Picual es más intenso y equilibrado. Todos ellos son AOVEs ecológicos.
La Laguna Selecta, por su parte es un AOVE más sofisticado y equilibrado, un coupage ideal para quienes buscan un toque distinto en cada plato. Mientras que La Laguna Ecológico es la elección perfecta para quienes valoran el sabor puro y natural.
Nuestros vírgenes extra han sido merecedores de importantes premios que reconocen el trabajo que realizamos en el campo y en el molino.
¿Qué papel juega la innovación en una marca con tanta tradición como Sucesores de Hermanos López?
La innovación en la tecnología resulta fundamental en todo el proceso, ayudando a que sea más eficaz, eficiente y optimo. Somos una empresa pequeña que tratamos de ir adaptándonos a todos los avances tecnológicos.
¿Qué controles o pruebas realizas para asegurar que el producto final cumple los estándares de máxima calidad?
Una vez obtenido el AOVE se realizan análisis químicos y catas organolépticas para determinar que se trata de un AOVE de calidad. Una vez en bodega se realizan catas periódicas para garantizar la buena conservación.

¿Qué crees que busca hoy en día el consumidor de AOVE?
Sin duda los amantes del AOVE buscan calidad y la variedad en las sensaciones que le pueden dar los distintos tipos de aceite según la variedad, punto de maduración, etc. También hay mucho consumidor que le condiciona más el precio que la calidad. Queda un gran camino todavía para que el consumidor reconozca y dé el valor que merece a nuestros AOVEs.
¿Cómo ves el futuro del sector y del oficio de maestro de almazara en los próximos años?
El futuro del sector va a estar marcado por la correcta coexistencia del olivar tradicional y del olivar superintensivo, que juegan distintas ligas en cuanto a costes de producción y exigencias del precio final de venta.
Respecto al oficio del maestro de molino, tenemos el gran reto de convertirlo en un trabajo atractivo. Hay una falta de personal evidente para una labor que necesita dedicación, sacrificio y que requiere de un interés auténtico por el mundo del aceite. Una de las tareas que he asumido con orgullo en los últimos años es la formación de personal para que pueda haber relevo generacional, con jóvenes preparados y motivados que impulsen nuestro sector.