La propuesta sobre el MFP se basa en fusionar los más de 50 programas y políticas europeas en prácticamente tres áreas con sus fondos (más una cuarta reservada para el presupuesto de las instituciones comunitarias). Cooperativas ha explicado que esta reconfiguración diluye la actual PAC en el llamado fondo único "que pretende, paradójicamente, hacer más con menos recursos. Esta medida no sólo cambiará la estructura de gobernanza comunitaria, sino que permite a los Estados Miembros, a través de la asignación de un cheque y programas nacionales desarrollar sus propias políticas (agricultura, pesca, cohesión, desarrollo territorial) a partir de un menú y fiscalización comunitaria".
El presupuesto asignado por la Comisión Europea para la agricultura y pesca para el periodo 2028-2035 es de 302.000 millones de euros, cuando para el periodo actual, sólo para la PAC, es de 378.000 millones de euros, lo que supone más de un 20% de recorte. "Este recorte hará que se ponga en riesgo la seguridad alimentaria de los europeos y la sostenibilidad económica, social y medioambiental de las zonas rurales. Además, la ausencia de actuaciones europeas limita la eficacia de este presupuesto", ha destacado esta organización.
Con esta propuesta de MFP, según Cooperativas, la actual PAC "no será ni agrícola, ni común, se desmantela. Aunque la Comisión propone blindar el apoyo a la renta obligando a los Estados Miembros a usar una parte de sus sobres en su financiación, quedan muchas dudas sobre herramientas claves para el futuro del sector, como son las medidas de gestión de mercado actuales y las inversiones estratégicas para abordar los retos económicos, sociales y de sostenibilidad". Además, según ha precisado, el apoyo a las medidas agrarias estaría supeditado a la consecución de reformas de la economía de cada país que nada tendrían que ver con la agricultura".
"Hoy es un día triste para la agricultura europea y, en particular, para la española", ha declarado el presidente de Asaja, Pedro Barato, quien ha considerado que "una reducción del 20-30% en los fondos de la PAC es un ataque directo al futuro del sector. No contempla la inflación, no reduce la burocracia, no da estabilidad a los agricultores ni a los jóvenes que quieren incorporarse".
Barato ha señalado que desde Asaja, y junto al resto de organizaciones agrarias europeas, "exigimos una PAC justa, fuerte y con un presupuesto digno que garantice el relevo generacional, la seguridad alimentaria, el equilibrio territorial y la supervivencia de nuestros cultivos continentales".
La organización ha insistido en que seguirá trabajando desde el Parlamento Europeo y el Consejo para "defender lo que nos pertenece: el presente y el futuro del campo".
Para el secretario general de COAG, Miguel Padilla, “la UE ha decidido sacrificar la PAC en el altar de la geopolítica y el pago de la deuda de los fondos Next Generation. Los hechos marcan prioridades: entre tractores y tanques, entre futuro para los jóvenes agricultores y misiles para blindar fronteras, entre alimentación y defensa, Von der Leyen ha elegido recortar un 22% los fondos agrarios y multiplicar por cinco el gasto militar. Es inaceptable”.
Esta organización ha subrayado la "incoherencia" de exigir sostenibilidad, digitalización e innovación "mientras se recortan precisamente los fondos que permiten avanzar en esas direcciones. ¿Cómo vamos a rejuvenecer el campo si no se garantizan las ayudas para jóvenes? ¿Cómo vamos a hacer agricultura verde sin apoyo a la modernización?”, ha cuestionado.
A su juicio, "diluir el segundo pilar de la PAC, desarrollo rural, en un fondo único por país con otra serie de políticas de cohesión, enmascara un recorte encubierto sin precedentes y una renacionalización en toda regla. Cuando necesitamos más Europa se cargan la gran Política Agraria Común”.
COAG, que ha advertido de que el abandono institucional del campo tendrá consecuencias sociales y políticas, además de efectos directos en la cesta de la compra de los consumidores, ha reclamado al Gobierno y "a nuestros europarlamentarios que se planten y defiendan ante Bruselas una PAC fuerte, con dos pilares sólidos y una dotación suficiente".
Finalmente, el secretario general de UPA, Cristóbal Cano, ha asegurado que "nos ponemos directamente en contra de los posicionamientos que hemos conocido, tanto prepsupuestariamente como del diseño de la nueva PAC".
Cano ha hecho un llamamiento a los grupos políticos y europarlamentarios españoles para que "se opongan frontalmente en bloque a esta propuesta", explorando nuevas vías de financiación y recuperando las estructuras de la PAC "tal y como se han tenido en las últimas décadas".
"Nos enfrentamos a nuevos retos con menos recursos y es imposible pedirnos más con menos aportaciones", ha recalcado, al tiempo que ha afirmado que esta propuesta "tiene que tirarse para atrás".
Agricultores de toda Europa se dieron cita ayer en Bruselas para rechazar "la desaparición de la PAC como una política autónoma y para demandar a la Comisión Europea que mantenga su estructura de dos pilares y refuerce su presupuesto para atender a todas las exigencias con las que deben cumplir los agricultores y ganaderos europeos en los próximos 10 años".