El embajador de Palestina en Madrid, H.E. Musa Amer Odeh, fue recibido por el director ejecutivo del COI, Abdellatif Ghedira, los dos directores ejecutivos adjuntos, Jaime Lillo y Mustafa Sepetçi, y los principales jefes de unidad de la Secretaría Ejecutiva, quien dieron la bienvenida a Palestina en nombre de todos los países miembros del organismo.
Durante su intervención, Odeh recordó que el olivo es un símbolo universal de la paz y dio las gracias al personal de la Secretaría Ejecutiva por su acogida. Asimismo, los diplomáticos y embajadores que asistieron a esta reunión valoraron el reconocimiento internacional de un socio importante en el sector olivícola global.
En este acto, la bandera palestina fue levantada junto a las de los demás países miembros del COI.
Fue en 1959 cuando, como consecuencia de la firma del primer Convenio Internacional del Aceite de Oliva por parte de los gobiernos de Bélgica, España, Francia, Grecia, Israel, Libia, Marruecos, Portugal, Reino Unido y Túnez, cuando tuvo lugar la creación de esta organización en Madrid, bajo los auspicios de Naciones Unidas. Han pasado 58 años y ya son seis los convenios internacionales (el último de ellos entró en vigor el 1 de enero de 2017).
El COI ha destacado en su página web que desde su creación contribuye de manera decisiva al desarrollo responsable y sostenible del olivar y constituye un foro mundial donde se debaten las políticas a adoptar y se abordan los retos a los que se enfrenta el sector.
Entre sus actuales miembros se encuentran los principales países productores e importadores mundiales de aceite de oliva y aceitunas de mesa. En los países productores miembros del COI se concentra el 98% de la producción mundial de aceituna, principalmente localizada en la región mediterránea.
Según los últimos datos del COI, se prevé que Palestina produzca esta campaña 19.500 toneladas de aceite de oliva, frente a las 21.000 toneladas de la temporada anterior.
