Las salidas de aceites envasados en julio se situaron en 61,5 millones de litros (+2,2% respecto al mismo mes de un año antes), de los que 31,6 millones correspondieron a aceite de oliva y a aceite de oliva virgen; 1,1 millones de litros a aceite de orujo de oliva; y 28,7 millones a aceites refinados de semillas oleaginosas (25,3 millones de girasol y 3,3 millones de mezcla de semillas).
En concreto, las ventas de la categoría virgen sumaron en ese mes un total de 2,3 millones de litros (+56,5% respecto a juliode 2019), mientras que las de virgen extra se elevaron un ligero 0,84%, hasta 12 millones de litros.
Por su parte, las ventas de aceite de oliva suave e intenso se situaron en 12,1 millones de litros (+31,9%) y 5 millones de litros (+14,3%), respectivamente.
Volviendo a los datos de lo que va de campaña 2019/20, las ventas totales se situaron en 286,6 millones de litros, frente a los 271,7 millones que se vendieron en el mismo periodo de la temporada anterior, lo que supone un aumento del 5,47%.
En cuanto a las cifras de ventas de aceite de oliva suave se situaron en 102,5 millones de litros (+3,60%), mientras que las de intenso cayeron un 0,91%, hasta 43,3 millones de litros. De aceite de orujo de oliva salieron en ese periodo un total de 10,4 millones de litros (-9,67%).
Finalmente, en porcentajes de ventas en los siete primeros meses del año, el aceite de oliva virgen (extra y virgen) representó el 45,63% frente al 49,73% del mismo periodo de 2019. El aceite de oliva suave, por su parte, representó el 38,31% frente al 33,88% registrado un año antes; mientras que el aceite de oliva intenso se ha mantenido en un 16% entre enero y julio de 2020.
